Está en la cúspide, a 67,5 metros de altura, y se accede en solo 1 minuto mediante un ascensor. La obra no afectó en ningún sentido al emblemático edificio.
La Ciudad inauguró el mirador del Obelisco porteño, una obra que cambia para siempre la postal de Buenos Aires para el mundo. Incluye un ascensor en su interior para subir hasta los 67,5 metros de altura en solo 1 minuto y tener las mejores panorámicas del territorio porteño.
Al Obelisco se entra desde la Plaza de la República, en el cruce de las avenidas 9 de Julio y Corrientes, donde fue izada por primera vez la Bandera Nacional Argentina. Se accede al elevador a través de 8 escalones, que está sostenido mediante un sistema de anclajes y tiene una escalera caracol metálica alrededor en caso de ocurrir una emergencia.
La cabina del ascensor, que puede trasladar a cuatro personas a la vez, tiene tres de sus cuatro lados vidriados y, en el restante, una pantalla. Sube hasta los 55 metros en un minuto y, al salir, hay que subir otros 35 peldaños para llegar al mirador, donde están las cuatro ventanas que apuntan al Norte, Sur, Este y Oeste para disfrutar las vistas de la Ciudad.
Como se trata de un Monumento Histórico Nacional, el Obelisco debe resguardarse, por lo que la obra no afectó en ningún sentido el edificio, ni el exterior, ni las paredes internas, ni la cúspide.
"Este gran proyecto de ingeniería revaloriza uno de los símbolos porteños. El mirador panorámico es un nuevo atractivo turístico que cambiará la manera de ver nuestra Ciudad y su patrimonio", dijo el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, en la inauguración.
Antes, para ascender a la cima había que subir una escalera marinera de 206 escalones y había que hacerlo con casco, guantes de amianto y arneses y la asistencia del personal de Defensa Civil.
Durante el mes de mayo, y por el aniversario del Obelisco, habrá visitas gratuitas para vecinos con cupo limitado. El Ente de Turismo de la Ciudad está trabajando en un proceso licitatorio para la operación del mirador, que incluirá también una propuesta museográfica.
El Obelisco fue creado por el arquitecto tucumano Alberto Prebisch para celebrar los 400 años de la primera fundación de Buenos Aires. Desde un principio, el proyecto contemplaba la instalación de un elevador, según consignó en 1936, año en el que se erigió el monumento, el intendente Mariano de Vedia y Mitre en una carta: "Existe el propósito de dotarlo de un ascensor interno que permita el acceso del pueblo a la cúspide del monumento".
Desde entonces, 34 intendentes y seis Jefes de Gobierno gobernaron la Ciudad. Casi 89 años después de su construcción, el proyecto de Prebisch se completa al 100%.
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