El Chino Maidana, a pura guapeza, defendió su corona

Con un Luna Park a pleno, como nunca había ocurrido desde su reapertura, y 11 mil almas vibrando como en las viejas veladas gloriosas del boxeo, Marcos El Chino Maidana retuvo la corona mundial interina superligera (la otra mitad está en manos del británico Amir Khan), al vencer por puntos en fallo unánime (117/110, 115/112 y 117/110) al norteamericano y ex campeón DeMarcus Corley, en un combate que fue “una verdadera guerra”, tal como había anticipado el oriundo de Washington. Maidana, de 27 años, llegaba con su implacable foja de antecedentes de 28-1-0, 27 KO a enfrentar al estadounidense de 36 años, que fue campeón mundial de los 63,500 por la OMB entre 2001 y 2003, y un record de 37-13-1, 22 KO. La expectativa empezó a cubrirse con un inicio pobre, con mucho estudio y un Maidana demasiado frío que le permitió a Corley, con muy poco, imponer su presencia. El argentino despertó en el segundo, en base al poder de su mano derecha y, desde allí, dominó claramente a su rival en esa segunda vuelta. Pero en el tercer asalto hubo un detalle que afectó el combate: Corley, con la cabeza, le cortó la ceja a Maidana y el árbitro panameño Julio César Alvarado no realizó la advertencia que correspondía y la pelea entró en un terreno ordinario, en el que Corley apeló a malas artes, transformándola con pasajes antirreglamentarios en una pelea muy sucia. Maidana se recuperó del corte y, dentro del contexto en el que ingresó la pelea, Corley perdió su elegancia y el argentino empezó a prevalecer. Perdió por poco el quinto asalto pero ganó el sexto gracias a un recurso que hasta allí no había utilizado (y debió hacerlo): el uppercut. Con una zurda dejó sentido a su rival que estuvo a punto de caer sobre el final de la vuelta, algo que ocurrió en el séptimo round, cuando pareció decretarse el knoct out, con un cross de derecha al mentón, del que Corley se recuperó con lo justo para aguantar, con dignidad y evitar un desenlace que parecía depender del golpe de gracia que no llegó ni en el octavo, ni el noveno. El cambio de aire le permitió a Maidana mantener ventaja en el octavo, pero ya no en el noveno, con un Corley muy recuperado y con firmeza, con lo que hizo dudar a Maidana que, en el décimo pareció ahogado y con pocas respuestas. Muy cansado, Maidana también perdió el undécimo, menos decidido en el intercambio. En último, con mucho amor propio, Maidana guapeó y terminó dejando una mejor imagen. Nuestra tarjeta también lo daba vencedor pero por margen más estrecho: 115 a 112. Estuvieron las figuras de siempre, acompañadas también de personalidades como Luciano Castro, el Puma Carlos Manuel Morete, Edgardo Nievas (el actor que interpretó a Gatica), Sergio Lapegüe, Pata Villanueva, Horacio Rodríguez Larreta y algunos otros integrantes de la farándula que no se dio cita masiva. Si lo hicieron colosos del boxeo como la Tigresa Acuña, el retador mundialista Mario De Marco, Marcelo Domínguez y Jorge “Locomotora” Castro, quien anunció en forma exclusiva vía DIARIO POPULAR su intención de volver al ring para lo que tiene en mente desafiar en la categoría crucero a Hugo “Pigu” Garay. Buena parte del color de la noche lo aportó la barra de San Lorenzo (que llegó al Luna tras la victoria del Ciclón ante All Boys) atraída por la actuación de César Cuenca, y también del grupo gremialista vinculado a la industria de la leche, ATILRA. En la previa se destacó como semifondo el triunfo por puntos y en fallo dividido, en diez rounds, del santiagueño Guillermo de Jesús Paz (63.400), ante el bonaerense radicado en La Pampa, Claudio El Pumita Olmedo (63.400), pelea en la que estuvo en juego el título latino interino superligero del CMB que, hasta anoche ostentaba el Pumita. En en el resto de la velada, Daniel Sanabria (87,35) le ganó por puntos en tres rounds a Patricio Pitto (91.500) y Martín Coggi (63,300) venció en knock out 2 a Juan Abrego (63.750) en polémica definición por lo que pareció una exagerada caída de Abrego. Mientras que César Cuenca (63.500) le ganó por puntos en 8 rounds a Mauricio Pereira (82.650), quien no pudo dar el batacazo que se esperaba.