Las imágenes se difundieron en las redes sociales y las autoridades de la entidad a la que iba a representar en su nuevo rol de directora decidieron expulsarla por considerar que la deportista de Bélgica tuvo una conducta “inapropiada”.
Tara Gins, que fue ciclista profesional entre 2016 y 2020 en el equipo del Lares-Waowdeals, el Health Mate y el Memorial Santos, tomó la palabra.
Aseguró que ’'tenía un acuerdo para empezar a trabajar con un equipo como directora deportiva. Era un equipo masculino, en el que trabajaría con jóvenes ciclistas y élite’', pero el acuerdo quedó trunco luego de su producción para Playboy.
Además, Tara Gins aseguró que “probablemente haya sido lo mejor, pues no le interesa trabajar con quienes no son capaces de ver sus verdaderas capacidades”.
También arremetió contra la moralina de quienes la criticaron por posar para una revista como Playboy, pero la acosaron e hicieron sentir incómoda por su físico a la largo de su carrera en el ciclismo.
“Ya he vivido muchas cosas negativas con los jefes de equipo o los masajistas. Una vez un mecánico se metió en la ducha conmigo después de un entrenamiento”, aseguró.
“En todos los años que he corrido he vivido malas experiencias. Me han agredido literalmente. En más de una ocasión me besó algún compañero del equipo y tuve que apartar a esa persona de mí. Tuve comentarios muy inapropiados de los jefes de equipo sobre mi aspecto, sobre mi peso, sobre lo que no me harían si tuviera un aspecto diferente”, agregó.
Sin este trabajo que ya tenía entre manos, Tara Gins no dio indicios sobre su futuro en el ciclismo u otras actividades en Bélgica.
“Quiero agradecer todos los mensajes de cariño y afecto que me enviaron y dejar esto atrás lo antes posible”, concluyó.