El defensor español de 39 años está sin club desde que dejó a final de la temporada pasada el Sevilla. Fernando Gago lo conoce de su paso como jugador en el Real Madrid y trascendió que Juan Román Riquelme haría un intento por sumarlo.
El año en el que el fútbol sudamericano sumó a un español como Iker Munian para San Lorenzo, al neerlandés Memphis Depay al Corinthians de Brasil y al danés Martin Braithwaite en Gremio del mismo país, entre otros jugadores, podría cerrarse con la llegada del también español Sergio Ramos a Boca.
Por el momento es solo un deseo en tiempos prenavideños, pero un llamado podría cambiar la historia. El defensor de 38 años sigue sin club y desde el Zeneize están dispuestos a hacer un intento por sumarlo a partir de enero de 2025. Inactivo desde mayo, el campeón del Mundo en Sudáfrica 2010 será quien decida si quiere vivir la experiencia del fútbol argentino y disputar el Mundial de Clubes bajo las órdenes de Fernando Gago, quien fuera su compañero en el Real Madrid.
Al andaluz que cumplirá 39 en marzo tuvo un último paso por Sevilla, club que lo vio nacer futbolísticamente y del que se fue libre a mitad de año. Su rendimiento fue bueno y apenas se perdió un partido por una molestia muscular, por lo que se cree que su estado físico no sería un impedimento. De hecho, sus posteos en redes sociales lo muestran activo y en forma.
Años atrás, el propio Gago había contado que el zaguero soñaba con vestir la azul y amarilla. Hoy ese anhelo está más cerca que nunca, aunque todavía no hay ninguna negociación abierta. La incógnita que tienen en la Ribera es si estará dispuesto a mudarse a Buenos Aires y vivir el fútbol argentino desde adentro.
La situación concreta es que Juan Román Riquelme va a hacer el llamado a Sergio Ramos para conocer su situación y explicarle su deseo de sumarlo a Boca. Luego de que eso suceda, el español definirá si las gestiones avanzan o si todo queda en una simple charla y en un vínculo platónico.
Sergio Ramos lleva más de 1.000 partidos como futbolista profesional y siempre se caracterizó por su plenitud física. A los 38, la inactividad de siete meses, que sería de más de ocho en su eventual arribo a Boca, podría costarle caro, pero tanto Gago como Román y todo el entorno Xeneize confían en que su jerarquía le permitirá adaptarse rápidamente y convertirse en la otra gran figura del club de cara al Mundial de Clubes de junio.
Luego de dos temporadas en Paris Saint Germain tras su salida de Real Madrid, donde es ícono y leyenda, Sergio Ramos volvió a Sevilla a cerrar el círculo de su carrera. En el conjunto andaluz disputó 36 partidos y tuvo un buen nivel, pero no renovó contrato. Con el pase en su poder desde mitad de año, el defensor recibió distintas ofertas, pero no volvió a jugar. Su intención es agregarle una camiseta más a su carrera antes del retiro, pero por ahora sigue sin club.