El día de la sentencia llegó y Sebastián Villa fue condenado este viernes a la pena de dos años y un mes de prisión condicional por violencia de género contra su expareja Daniela Cortés.
Si bien el futbolista se desempeñó este tiempo sin inconvenientes y se mantuvo dentro del primer equipo de Boca, incluso anoche ante Arsenal, o incluso en encuentros donde tras presentarse a declarar en los tribunales luego fue directo a jugar, la situación ahora es muy distinta.
En el Xeneize se esperaba la resolución para decidir qué hacer con el colombiano que ahora sí ya no volvería a vestir la camiseta del conjunto de La Ribera, en consonancia con el protocolo del club para este tipo de casos. Esto al margen de que la defensa de Villa estaría analizando apelar la sentencia, por lo que no quedaría firme.
El protocolo de la institución contempla "todos los hechos de violencia en razón de género que se produzcan dentro de las instalaciones del club o que afecten a éste, como así también a todas las personas, sin necesidad del tipo de modalidad que los vincule" con Boca.
Entre los diferentes casos, se encuentran incluidos los de "violencia doméstica contra las mujeres", pero el protocolo aún no había sido implementado por el club debido a la presunción de inocencia.
Paradójicamente, en el que sería el último partido oficial del delantero colombiano, Boca salió a la cancha con una bandera con la leyenda "Ni una menos", en el marco de una campaña de la Liga Profesional y la Asociación del Fútbol Argentino en el que se difunde la línea gratuita 144 para hacer denuncias ante la violencia de género.
El presidente de Boca Juniors, Jorge Amor Ameal había manifestado oportunamente al ser consultado sobre el caso de Sebastián Villa: "Si es culpable hay que curarlo, esta es la historia. Nosotros estamos esperando lo que determine la Justicia. A la gente hay que ayudarla, no hay que seguirla sancionando, complicándole la vida. Si el chico tuvo un problema lo podemos resolver".
Juan Román Riquelme, por su parte, remarcó a lo largo del proceso: "Una cosa es si hablamos de fútbol, el otro tema es diferente. Todos odiamos el otro tema, sea quien sea, lo repudiamos, nos da bronca. Es un tema tan sensible que hasta tenés que pensar 74 veces lo que tenés que decir. Esperemos a ver lo que diga la Justicia".
El director técnico del plantel de Fútbol Femenino de Boca, Jorge Daniel Martínez fue procesado hace dos semanas por la Justicia por el abuso sexual simple en perjuicio de la jefa de prensa del plantel, luego de que ella lo denunciara por hechos que tuvieron lugar en 2022, por los que oportunamente fue separado preventivamente del cargo.
La determinación la adoptó el juez Alberto Baños quien lo procesó por abuso sexual simple a Florencia Marco, empleada del club desde 2011 y vinculada al fútbol Femenino desde 2019.
Marco denunció que sufrió varias situaciones de acoso e intimidación por parte del exfutbolista devenido en entrenador, y que fue manoseada en un viaje a Quito, por la final de la Copa Libertadores femenina.