Para Estudiantes, esta Copa Libertadores es una frustración. Porque justo cuando el equipo de Vivas pretendía jugar sus últimas fichas en busca de la clasificación a la próxima fase, sufrió en carne propia la recuperación del último campeón, pues Atlético Nacional, que no tenía puntos en la competencia, se despertó, y festejó su primera victoria gracias a los goles de Uribe, Dayro Moreno, Torres y Andrés Ibargüen, lo que deja al Pincha (que descontó gracias a un tanto en contra de Cuesta) con un pie afuera de los octavos de final, y con perspectiva de buscar pelear por el tercer lugar, para poder pasar, por lo menos, a la Copa Sudamericana.
El Pincha, sin disimular sus obligaciones, armó un esquema que llamó la atención, con un 4-1-4-1, que dejó a Viatri demasiado solo arriba, y esa postura le entregó espacios y protagonismo a un Atlético Nacional que cuenta con individualidades como para poder desequilibrar.
El primero nació en una proyección de Bocanegra y un remate preciso de Uribe desde la puerta del área. Y más tarde, desbordó Quiñones, también por la derecha, y su centro fue una asistencia para Moreno, que la mandó a guardar.
En el complemento, no cambió el escenario. Estudiantes salió a hacer la heroica, y de entrada, el local lo castigó en el contraataque, con una corrida de Quiñones y la definición de Ibargüen.
El del honor llegó por un gol en contra de Cuesta y Torres le puso el moño a la victoria de Atlético con un golazo. Un resultado que dejó al Pincha último en la zona, por diferencia de gol, y dependiendo casi de un milagro para poder estar en los octavos.