Aunque el argentino logró enviar el balón al fondo de la red, el VAR anuló el gol por una supuesta doble tocada del balón, desatando una ola de opiniones divididas.
Durante el partido de vuelta de los octavos de final de la UEFA Champions League entre Atlético de Madrid y Real Madrid, un penalti ejecutado por Julián Álvarez se convirtió en el centro de la polémica. Aunque el argentino logró enviar el balón al fondo de la red, el VAR anuló el gol por una supuesta doble tocada del balón, desatando una ola de opiniones divididas.
Este tipo de momentos en el fútbol no solo capturan la atención de los aficionados en el estadio, sino también de aquellos que siguen el deporte desde aplicaciones móviles. Para quienes están interesados en apostar o simplemente disfrutar del seguimiento de partidos en su dispositivo, existen opciones que pueden ser útiles.
En este contexto, es interesante conocer cuáles son las mejores apps de apuestas deportivas para estar al tanto de todo lo que acontece en el mundo del deporte.
En una tanda de penaltis cargada de tensión, Álvarez se preparó para ejecutar su disparo. Sin embargo, en el momento crítico, perdió ligeramente el equilibrio. Según las imágenes revisadas por el VAR, su pie derecho habría tocado primero el balón antes de que este rozara su pie izquierdo, lo que constituye una infracción según la Regla 14 del reglamento del fútbol. Esta norma establece que el ejecutor no puede tocar la pelota dos veces antes de que otro jugador intervenga. Por lo tanto, el árbitro Szymon Marciniak invalidó el gol tras consultar con los asistentes del VAR.
La decisión generó incredulidad tanto en Álvarez como en sus compañeros y los aficionados rojiblancos. Según fuentes cercanas al vestuario del Atlético, el delantero no sintió haber tocado el balón dos veces y expresó frustración por la falta de imágenes claras que respaldaran la decisión. No obstante, imágenes captadas posteriormente mostraron a Álvarez admitiendo a sus compañeros que era posible que hubiera ocurrido un doble contacto, aunque no estaba seguro.
Por su parte, Diego Simeone, entrenador del Atlético, cuestionó abiertamente la decisión en rueda de prensa. "Levanten la mano si alguien vio claramente cómo se movió el balón", desafió a los periodistas presentes. Mientras tanto, jugadores del Real Madrid como Rodrygo admitieron haber presionado al árbitro tras notar algo "extraño" en la trayectoria del balón.
El incidente ha sido comparado con un momento similar protagonizado por Lionel Messi durante la final del Mundial 2022 contra Francia. En aquella ocasión, Messi también resbaló al ejecutar un penalti, pero logró evitar un segundo contacto con el balón. A diferencia de Álvarez, su gol fue válido y ayudó a Argentina a conquistar el título mundial. Este paralelismo ha reavivado debates sobre la aplicación estricta de las reglas y la influencia del VAR en momentos decisivos.
La polémica no solo ha dividido a los aficionados sino también a expertos en arbitraje. Mientras algunos defienden que Marciniak aplicó correctamente las reglas, otros critican que decisiones tan técnicas puedan determinar el destino de un equipo en una competición tan importante. Incluso se ha sugerido que UEFA debería revisar esta norma para evitar situaciones similares en el futuro.
El Atlético había logrado empatar la eliminatoria con un gol temprano de Conor Gallagher, pero finalmente cayó eliminado tras perder en los penaltis. Para los colchoneros, este episodio es otro capítulo doloroso en su historia frente a su eterno rival, quien ahora avanzará para enfrentarse al Arsenal en los cuartos de final.
Mientras tanto, Julián Álvarez queda marcado por este desafortunado episodio que no solo afectó al resultado del partido sino también a su confianza como jugador clave para el Atlético. Sin embargo, como suele ocurrir en el fútbol, estas experiencias pueden convertirse en lecciones valiosas para futuros desafíos.
El penalti anulado a Julián Álvarez es un recordatorio de cómo los pequeños detalles pueden cambiar el curso de un partido y desatar debates interminables sobre justicia e interpretación reglamentaria. Más allá del resultado deportivo, este incidente plantea preguntas importantes sobre cómo equilibrar tecnología y humanidad en uno de los deportes más apasionantes del mundo.