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Si sale campeón llegará a 45 partidos seguidos sin perder la punta, algo nunca logrado en el fútbol argentino. Además, tiene un rendimiento de casi el 80 por ciento, mejor que el del Apertura 1998, con el Virrey.
Este Boca puntero de la Superliga, criticado desde el juego pero contundente desde los números, amenaza con batir todos los récords del club, al menos desde la era de Carlos Bianchi hasta la actualidad. Por lo pronto, con la victoria lograda ante Talleres de Córdoba igualó la marca del primer equipo del Virrey, que en 1998/99 estuvo 39 fechas puntero, asegurándose además superarlo con holgura si tenemos en cuenta que ahora lleva 9 unidades de ventaja.
Repasando la campaña del equipo del Mellizo en este torneo, lo que más sorprende es su efectividad, ya que consiguió casi el 80 por ciento de los puntos. Exactamente el 79,36%, producto de 16 triunfos, 2 empates y 3 derrotas, superando de este modo la mejor producción desde Bianchi hasta hoy, que fue precisamente con el Virrey, en el Apertura 1998, con el 78,94 de eficacia.
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Por otra parte, analizando este torneo, es el equipo que más partidos ganó y el más goleador, con 39 tantos, y el de mejor diferencia entre los que convirtió y recibió. Además, le sacó nueve puntos al segundo, algo que dependerá del partido de este miércoles entre Independiente y San Lorenzo, ya que si gana el azulgrana pasará a ser el segundo y la diferencia se acortará a 8 unidades.
En ese camino, este Boca irá también por otra marca, la del equipo de Julio César Falcioni, que en el Apertura 2011 salió campeón con 12 puntos de ventaja sobre el escolta, que en ese caso fue Racing. Un título que, vale recordar, fue logrado de manera invicta, en un torneo de 19 fechas, donde obtuvo 12 triunfos y 7 empates, con el agregado de ser el que menos goles recibió en la historia de los certámenes cortos, con apenas 6.
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En pocas palabras, el Boca conducido por Guillermo Barros Schelotto está a punto de conseguir el bicampeonato, el que no logra desde el Apertura 2005 y Clausura 2006, cuando estaba Alfio Basile como entrenador. Y con una ilusión guardada a futuro, que es la de obtener un tricampeonato, algo que jamás pudo conquistar en su historia y que estuvo cerca de poder hacerlo precisamente en ese año 2006, cuando perdió un título increíble, con Ricardo La Volpe como DT.
Boca, entonces, dueño indiscutido del fútbol local, aniquila sus propios récords y ahora quiere saldar sus deudas en el plano internacional.
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