La Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPECA) informó que sus afiliados, con plantas de procesamiento, frigoríficos y buques radicados en la localidad de Puerto Deseado, "sufren desde hace años acciones directas contra sus patrimonios, su normal funcionamiento, que atentan contra la totalidad de las empresas" del sector y la comunidad de la provincia de Santa Cruz.
En esta oportunidad -señala la entidad empresaria- "estibadores en Puerto Deseado Santa Cruz (Sindicato Unido de Estibadores Portuarios Patagónicos -SUEPP-) impidió que se carguen a un buque mercante los contenedores con las distintas producciones y, de esta forma, se perdió la posibilidad de exportar en tiempo y forma".
CAPEA también indico: "Asimismo la compañía naviera ha decidido que el buque mercante se vaya del puerto y continúe su viaje sin poder cargar los contenedores de la pesca" y señaló que cuenta con prueba documental de tal actitud de los estibadores.
"Esto genera un perjuicio enorme para nuestra actividad: no se puede cumplir con las ventas, facturar y, por consiguiente, tampoco cobrar ni cumplir con los compromisos pactados con anterioridad", advirtieron los empresarios.
CAPEA también señaló que al perjuicio que sufren el sector empresario pesquero de Santa Cruz, los estibadores atentan contra "el normal desarrollo de la comunidad de Puerto Deseado, sus habitantes y el comercio local, al no poder exportar, y por consiguiente también impedir la liquidación de divisas por exportaciones que tanto necesita nuestro país".
Por último, los empresarios pesqueros solicitaron "la urgente intervención de las autoridades locales para ordenar el conflicto, con un cese inmediato de amenazas e intentos de impedir las descargas, cargas y consolidación de contenedores a su cauce normal y habitual".