Visiblemente conmovida tras recibir la estatuilla del premio Martín Fierro en la categoría de mejor actriz de ficción diaria por su interpretación en la tira 100 días para enamorarse, el envío más premiado, y el que obtuvo el galardón de Oro, Carla Peterson, reflexiona sobre su particular momento y las razones por las que la propuesta de Underground para Telefe que durante el pasado año mantuvo notable adhesión social, se convirtió en uno de los íconos de la televisión.
La distinción, como corolario, acarreó un sinnúmero de comentarios cuando esta actriz, revolucionó el clima de la fiesta con un prolongado beso en la boca y su devoción hacia su compañera de labores Nancy Dupláa. "Qué difícil recibir un premio, porque de verdad no siento que sea justo. No hubiera podido haber hecho lo que hice sin vos. Todos sabemos lo que sos. Te amamos, sos una maestra. Yo la he visto hacer magia con las escenas. Te amo, te amo", repitió Peterson a Dupláa, con lágrimas en los ojos.
"Estoy muy nerviosa, creí que nos iban a dar uno a las dos. La verdad que pensé que nos iban a dar uno a las dos", insistió. "Nancy: gracias, este premio es de las dos. No hubiesen existido ni Laura ni Antonia. Vos sos mágica, tenés estrella. Tu alegría de todos los días nos guió. Sos el sol. Te amamos. Todos los que hicimos 100 días sabemos que este premio es de las dos", le dedicó con la voz entrecortada para finalizar su discurso, que también incluyó una inquietante petición a favor del aborto legal, preguntándole al público: "Se nota que la amo, ¿no?", disparó en el atril instalado en el escenario de uno de los salones principales del Hotel Hilton.
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Tras esas palabras, Carla, ya con mayor calma, ratifica lo expresado y comparte el sentimiento con una incontenible emoción. "La verdad es que no lo esperaba. Cualquiera de las dos lo merecíamos. Mi premio es el de Nancy y el de Nancy hubiera sido mío. Las dos sabemos lo que hicimos para hacer este programa. Sí, fue mucho lo que pusimos, la historia y todo. Juntas", indica en exclusiva un instante después de haberse alzado con el anhelado Martín Fierro.
"A Nancy la quiero mucho y también no sabía qué decir y en el momento surgió todos eso. Por eso los actores tenemos autores que nos escriben lo que tenemos que decir. Con un texto a decir va mejor", guiña un ojo con complicidad.
"La quiero mucho y sé cómo hicimos este programa así que lo que yo tenía que agradecer también la incluía a ella. Ella es una persona muy generosa y que te da mucho para que uno pueda lucirse también", señala con pupilas húmedas.
Es que la chica que, de modo verosímil, supo ponerse en la piel de Laura Contempomi encarnando una relación de dos mejores amigas con Dupláa (Antonia en la ficción), profundizó una fuerte amistad fuera del set. Un vínculo que nació hace más de dos décadas, desde el inicio de sus carreras, cuando comenzaron a trabajar en la inolvidable tira infanto juvenil Montaña Rusa.
"Nos reencontramos después de 20 años. Siempre hubo una amistad, pero ahora volvimos a hacerla crecer", resume esta artista que se destacó en ciclos televisivos tales como Verano del 98, AmorArte, Son amores, Lalola, Los exitosos Pells, Sos mi vida, Guapas, Tiempos compulsivos y En Terapia.
La tira creada por Sebastián Ortega que comandaron Carla Peterson, Nancy Dupláa, Luciano Castro y Juan Minujín, quién también se llevó su estatuilla, sobresalió por la hondura con que se trataban temáticas que en lo común no se frecuentan en una novela. Desde la inclusión, el bullying, la diversidad, el divorcio, la infidelidad, las drogas y el alcohol, la violencia de género, el embarazo adolescente y la homosexualidad, hasta la transexualidad y el cambio de identidad de Juana a Juani, tan bien manifestado por Maite Lanata quién obtuvo el Martín Fierro como mejor actriz de reparto.
"Pegó que hablábamos de lo que la gente necesitaba hablar y de lo que a nosotras nos hubiera gustado escuchar. Y eso pasó con el programa. No sé si hay pocas ficciones, pero ésta fue una y muy importante y muy contundente", asegura. Si bien 100 Días para Enamorarse no fue trascendental en su carrera, para Peterson es un sello distintivo difícil de olvidar. "Es importante para mí, pero nada distinto a cada paso que yo voy dando y que me va llevando a otra cosa. Fue muy lindo el equipo, el grupo que se armó y estuvimos muy bien", destaca.
"No llueven las ofertas de trabajo"
Caracterizada por la versatilidad tanto para representar roles trágicos como personajes con destacados tintes de comedia, Carla Peterson, confiesa transitar un compás de espera, luego del intenso año de100 Días para Enamorarse. "No tengo nada", aclara la blonda intérprete. "Todavía no hay ninguna propuesta. Por elección mía y por todo. A veces no es todo tan como todos imaginamos que te llueven ofertas y eso. Hay momentos. Hay momentos para propuestas y otros para la calma. Es normal para un actor tener mucho trabajo por momentos y por otros tener que generarlo. Veremos lo que surge durante el año", se atreve a confesar quién sobresalió en la esfera teatral con sus últimos trabajos como protagonista de La guerra de los Rose y Venus en piel.
Una noche de pañuelo verde y controversias
Comprometida con la realidad social y en especial con la causa que nuclea el pedido a favor del derecho al aborto legal, seguro y gratuito, Carla Peterson, tras recibir su Martín Fierro, se puso firme para reclamar la ley. "Acá es donde dejo de ser la tierna Carlita. Tengo que levantar este pañuelo", sostuvo desplegando el consabido pañuelo verde, símbolo de la lucha. "Agradecer a todas las mujeres que salieron a la calle y hablaron de algo que sólo a las mujeres nos pone en peligro", expresó con actitud desafiante la esposa de Martín Lousteau. "Es una realidad, aunque no nos guste. A mí no me gusta hablar del aborto. Ninguna mujer quiere atravesarlo, pero es una realidad. Pónganse de acuerdo. Lleguemos a un acuerdo para que las mujeres no sigan muriendo", pronunció al tiempo que agradecía al Colectivo de Actrices Argentinas. Como no podía ser de otra manera, el discurso vertido a favor del aborto en el momento en que se alzó con la estatuilla ganadora a la mejor actriz, ocasionó un sinfín de adhesiones y réplicas. La voz más contundente que se levantó en contra de lo manifestado por Peterson fue la de la polémica Amalia Granata. La candidata a diputada provincial por Santa Fe arremetió en su cuenta de Twitter hacia la actriz que reclamó la legalización del aborto y la importancia de la lucha a favor de la Ley. "La única realidad es que te metés en un terreno donde tu ignorancia supera tu discurso patético", exclamó en la red. 'Desde tu glamour te invito a charlar con las pibas pobres que decís defender para que entiendas sus reales necesidades. El aborto no está en sus prioridades".
Pequeñas delicias de la vida conyugal: "Me encanta mi vida con Lousteau"
En un año electoral, Carla Peterson, por un instante, parece correrse del lugar de consagrada actriz para ocupar el sitial de la mujer del diputado nacional Martín Lousteau. En esos momentos, dando prioridad a la pareja y a la familia que han formado junto a Gaspar, el hijo de ambos, lo que prima es el acompañamiento en la tarea e ir a la par. "Siempre estoy con Martín en lo que hace, siempre nos acompañamos. A veces es uno y otras veces es el otro. Nos toca a cada uno de acuerdo a la actividad que se tenga. Él me acompañó mucho el año pasado para que yo pudiera hacer este programa. Y bueno si él tiene que trabajar yo lo voy a acompañar. Me encanta mi vida con él’, resume con natural romanticismo. - ¿Cómo vivís los tiempos electorales donde un político se ve tan expuesto? ¿Te sentís con mucha movilización? -No. Quizá sea para él. Es más de peleas, de luchas, que otra cosa. No es tan emocionante como mi trabajo. Es emocionante, pero tal vez no tiene tanta sensibilidad. Hay otra cosa que se pone en juego a diferencia de lo que yo hago. Como se recordará,. Carla abandonó proyectos laborales para acompañar a Lousteau a Estados umnidos cuando fue embajador, y al volver pudo brillar en la tira que le valió el Martín Fierro a la Mejor Actriz de comedia diaria.