En Rosario y desde muy chico, Chiqui Abecasis descubrió que disfrutaba haciendo reír, un placer que aumentaba con el tiempo, y cada vez que tenía la oportunidad de actuar. Hoy es una marca registrada del humor.
Alfonso "Chiqui" Abecasis nació en Bella Vista, un típico barrio de Rosario y por esas cosas de la vida, fueron dos mujeres las que -desde pequeño- marcaron su destino en el mundo del espectáculo. Una fue su maestra del primario -del Colegio San José- que al descubrir su faceta actoral lo hizo subir a escenario en cada acto escolar; la otra fue su abuela, quien lo bautizó como "Chiqui", un apodo que con el correr de los años se transformaría en su nombre artístico.
Abecasis protagoniza -junto a Alejandro Müller, Mónica Farro y Kitty Locane- la obra "El Plan", que luego de una brillante temporada marplatense -donde fue nominada a los premios Estrella de Mar como Mejor Comedia- se presenta actualmente de jueves a domingo, en el Teatro La Comedia de la Ciudad de Buenos Aires.
Uno de los aspectos desconocidos en la trayectoria artística de Chiqui Abecasis es su trabajo como animador en los shows que se le ofrecen a bordo de los cruceros. Largo viajes recorriendo lugares increíbles, pero también, muy lejos de la familia y los afectos.
Suele suceder que durante los largos períodos en alta mar, a los artistas y tripulantes padecen efectos inesperados por estancia dentro del barco. De allí florecen las innumerables anécdotas que Chiqui Abecasis se encarga de contar con la gracia que lo caracteriza.
Chiqui Abecasis recuerda cómo fue su ingreso a uno de los programas humorísticos más recordados de los últimos décadas "El Humor de Café Fashion". Un ciclo que a pesar de su breve paso por la televisión -sólo dos temporadas en canal 9- es una referencia obligada a la hora de enumerar los shows que divirtieron a los argentinos.
Chiqui Abecasis explica el porqué del éxito de un programa que quedó marcado a fuego en la memoria de los argentinos, con Fernando Ciro, Beatriz Salomón, Ginette Reynal y Denise Dumas como anfitriones y un destacado elenco de humoristas integrado por Carlos Sánchez, Esteban Mellino -como el Profesor Lambetáin-, "Chichilo" Viale, Hugo 'el sapo" Cativa, "el Negro" Álvarez, Tuqui, Norman Erlich y Daniel Aráoz, entre otros.
Chiqui Abecasis sabe que tiene el don de la risa, y es por eso que se convirtió en un ferviente practicante de el yoga de la risa, una terapia que se basa en la posibilidad de reír sin una razón especifica, sin un estimulo externo. Sólo reír y empezar a tomar conciencia de los beneficios que esta acción genera en la mente y el organismo.
Dedicado de lleno a la risoterapia, Chiqui Abecasis dedica gran parte de su tiempo al estudio y el trabajo con los efectos sanadores de la risa. A través de Risas Poderosas trabaja con talleres para mejorar el bienestar y la convivencia, logrando importantes beneficios para la salud física y mental.
A pesar de mantener un estrecho vinculo con sus tres hijos -Luciano (reconocido jugador de fútbol), Guido e Irina (con quien participó en "Cantando por un sueño" en el 2012) Chiqui Abecasis sabe manejar el desapego, marcando claras diferencias con la posesión, porque "no es lo mismo estar juntos que estar unidos".
Chiqui Abecasis asume que ser rosarino te hace ser especial, tan especial que no reconoce provincia. También valora especialmente la aparición en su vida de la locutora Susana Manzelli -con quien formó pareja-, y a la que llena de elogios por cambiarle la vida.
Desde muy chico, Chiqui Abecasis descubrió que el hacer reír era su misión, algo que realiza en forma consciente y -muchas otras veces- como un acto reflejo. Es que tiene el don de la risa y quizás es por eso que nunca le tuvo miedo al ridículo.
Con formación actoral y el humor en la sangre, Chiqui se perfeccionó en canto, clown, magia cómica y pantomima, incorporando conocimiento, para poder seguir contagiando al prójimo con su filosofía.
Chiqui Abecasis, la risa como terapia de vida.
Agradecimiento: Tribu de Jah ; Risas Poderosas y Risas Poderosas Web