El cronista de CQC Andrés Kilstein presentó en la edición del lunes del popular programa periodístico un informe por demás particular: una carrera contra muertos vivientes o zombies.
La curiosa competencia consiste en que un grupo de corredores intenten completar un recorrido escapando de varias personas disfrazadas de zombis al tiempo que salvaguardan tres tiras de tela que deben llevar colgando de su espalda.
El propio Kilstein se animó a concretar el recorrido aunque más tarde debió recurrir a otro de los participantes para que le preste una cinta y pueda continuar. Habiendo llegado a la meta, Kilstein estaba tan feliz que hasta se santiguó a la usanza cristiana.
Pero no conforme con ser parte de esta práctica, el cronista decidió disfrazarse de zombie para intentar comprobar qué tanto asustan estas criaturas a los argentinos y comparar de esta manera la situación con la verdadera ola de terror que surgió en Estados Unidos tras el estreno de la serie The Walking Dead y que llevó incluso a la apertura de tiendas que venden objetos para afrontar un apocalipsis zombie.
comentar