Espectáculos
La infartante diosa de los 80 y 90 enfrenta una difícil realidad, con varios problemas económicos y de salud. "Tengo las nalgas hechas un colador", se lamentó
Qué mayor de 30 años no recuerda a Mónica Guido, aquella infartante actriz y vedette que interpretaba a la Doctora Guinda en la célebre y popular "Brigada Cola", que fue gatita de Jorge Porcel y una de las tapas más vendidas de la historia de Playboy en Argentina.
Famosísima y sex symbol para toda una generación, hoy Mónica no pasa el mejor de los presentes.
A sus 54 años, Guido luce algo demacrada y atraviesa varios problemas económicos y de salud.
Según la publicación, la ex vedette sufre una grave tendinitis que le impide desempeñarse normalmente en muchas tareas cotidianas. A su vez, a causa de sus problemas corporales y su aspecto físico, Guido no puedo aceptar algunas propuestas laborales que le hubieran significado un alivio en su ajustada economía.
"No puedo ni limpiar ni hacer la cama, y tampoco manejar. Recibí ua propuesta de trabajo hace un tiempo, pero tuve que rechazarla porque tengo las nalgas hechas un colador. Vivo de vender ropa en cabarets, restaurantes, donde sea. Vivo con lo justo. Nunca pedí una mano en la Asociación Argentina de Actores ni nada a nivel gubernamental. Vivo austeramente", se sinceró.
Finalmente, y sobre un posible regreso a los medios, Mónica declaró: "Estoy borrada. No sé si hago mal, ya está. Todos tenemos una etapa, hoy estoy feliz con mi hija –que hoy tiene 20 años y es fruto de su matrimonio con Javier Caminotti, hijo de un ex ministro de economía cordobés- y con los perros. No tengo intenciones de volver, aunque si es algo lindo capaz que sí".
Fuente: Revista Pronto
A sus 54 años, Guido luce algo demacrada y atraviesa varios problemas económicos y de salud.
Según la publicación, la ex vedette sufre una grave tendinitis que le impide desempeñarse normalmente en muchas tareas cotidianas. A su vez, a causa de sus problemas corporales y su aspecto físico, Guido no puedo aceptar algunas propuestas laborales que le hubieran significado un alivio en su ajustada economía.
"No puedo ni limpiar ni hacer la cama, y tampoco manejar. Recibí ua propuesta de trabajo hace un tiempo, pero tuve que rechazarla porque tengo las nalgas hechas un colador. Vivo de vender ropa en cabarets, restaurantes, donde sea. Vivo con lo justo. Nunca pedí una mano en la Asociación Argentina de Actores ni nada a nivel gubernamental. Vivo austeramente", se sinceró.
Finalmente, y sobre un posible regreso a los medios, Mónica declaró: "Estoy borrada. No sé si hago mal, ya está. Todos tenemos una etapa, hoy estoy feliz con mi hija –que hoy tiene 20 años y es fruto de su matrimonio con Javier Caminotti, hijo de un ex ministro de economía cordobés- y con los perros. No tengo intenciones de volver, aunque si es algo lindo capaz que sí".
ANTES Y AHORA. 1995 Y 2014 (PASAR EL MOUSE POR LA IMAGEN)
Fuente: Revista Pronto
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