Según reportes, el entorno de Liam había expresado preocupación por su bienestar en las semanas previas a su muerte.
El cantante Liam Payne, exmiembro de la banda One Direction, falleció tras caer de un tercer piso de un hotel ubicado en el barrio porteño de Palermo, Buenos Aires. El artista británico estaba en el país desde principios de mes, cuando llegó para sorprender a su excompañero de la boyband Niall Horan, quien se presentó en Argentina el pasado 2 de octubre.
Según reportes, el entorno de Liam había expresado preocupación por su bienestar en las semanas previas a su muerte. Amigos cercanos señalaron que el cantante, de 31 años, estaba atravesando un momento difícil, lidiando con problemas personales y profesionales.
“Sus amigos llevaban semanas preocupados por él porque estaba luchando con su carrera y quería sacar nueva música, pero sentía que no era tan bueno como sus otros compañeros de grupo, y ellos le decían que no era cierto”, compartieron fuentes de The Sun.
Y agregaron: “En las últimas semanas, su consumo de alcohol y drogas empezó a preocupar a sus amigos, que estaban planeando una intervención, así de grave era la situación. Les rompía el corazón verlo así, pero no sabían cómo organizar una intervención adecuada”.
Estos esfuerzos del circulo cercano de Liam continuaron hasta el mismo día de su muerte, en el que, al parecer, Payne terminó furioso por la insistencia de sus amigos por llevarlo a buscar ayuda profesional. "El día de su muerte actuaba de forma muy rara y errática. Uno de sus amigos volvió a sugerirle que buscara ayuda, pero eso pareció exacerbarlo aún más”, señaló una fuente anónimo al mencionado medio.
“Muchos de sus amigos le decían que buscara ayuda profesional o que fuera a rehabilitación, pero él no les hacía caso. El día de su muerte actuaba de forma muy rara y errática. Uno de sus amigos volvió a sugerirle que buscara ayuda, pero eso pareció exacerbarlo aún más”.