Defensor del perfil bajo y el trabajo, Emiliano Rella (35) avanza en los casilleros del mundo del espectáculo. Aquellos que supieron llevarlo por el camino de la conducción televisiva y radial, y a los que quiere retomar. También, por aquellos que le permitieron probar suerte en el teatro de revista y que hoy lo encuentra como parte del elenco de Sé Infiel sin Mirar con Quién, comedia en gira nacional. Hijo artístico de Carmen Barbieri, hoy se luce en una obra en la que, según sus palabras, cayó como paracaidista. "Después de un mes y medio de ensayo, me metí de paracaídas en la obra, y con eso me metí en todos los temas. Al estar de gira, se habla siempre de todo, pero no es un tema que esté latente porque es algo que estuvo vigente en el verano. Es raro que internamente haya habiendo grupitos de opiniones sobre una compañera que ya no está (Dallys Ferreira, que se fue denunciando acoso de Fabián Gianola), sobre un conflictos que algunos dicen que fueron y otros que no, y que hoy ya no trabaja en la obra. No podría ni opinar por la situación que le paso a Dallys con el suicidio de su hermano. Pero cada uno sabe en su cabeza, es un limite muy delgado", cuenta.
l El fantasma del acoso es algo que históricamente rodeó a los capocómicos o a las figuras principales de los elencos...
-¡Es verdad! Incluso, cuando yo estaba en la revista de Carmen Barbieri se decía que Santiago (Bal) salía con alguien o no, seducía... También, me lo ha dicho Carmen sobre Alfredo Barbieri, su padre. Siempre circularon las versiones de mujeres alrededor de un capocómico. A mí me parece que no está bueno mezclar las sábanas con el laburo. Pero si se mezcla y queda entre el capo cómico y la vedette o actriz de elenco, no lo veo mal si hay mutuo acuerdo. Ahora, si hay resistencia, conflicto de una de las partes que no quiere y para seguir manteniendo un laburo la mujer tiene que acceder, no me gusta. Yo nunca sugerí que alguien esté conmigo para que siga estando en mi programa, es mi postura como hombre. En el caso de Fabián, estuvo de invitado en programas que hice y lo hablé con él en un viaje de auto, y siempre escucho que habla de sus hijos, mujer, siempre con un perfil familiar adentro del elenco. Me parece una cagada que si algo no es verdad, joda a la familia del capocómico.
l Además, se corre el riesgo que proclama la frase "repite, repite que algo quedará, ¿no?
-¡Claro! El otro día Fabián me decía que no le daba para salir en cámara en cada programa para decir qué es verdad y qué mentira. Es una persona que elige no estar aclarando. A veces, aclarar, oscurece. Siempre la gente tiene la duda de estas cosas, el ambiente éste es así. La gente necesita y le gusta el cuentito. Aunque haya cosas que no son ciertas, la gente las cree igual. Reitero que la fantasía de que el capocómico siempre sale con alguien, de que pasa en los camarines, siempre estuvo y estará. Lo que yo vivo en Se infiel... es muy amable y cómodo, referido a la convivencia. Con Nico Scarpino somos amigos. Con Gianola se está armando una amistad. Hacemos de socios en el escenario y ahora la buena onda se esta generando también debajo de las tablas. Con Caro Papaleo, también nos llevamos bárbaro. Y en el caso de Sabrina Ravelli, ya de por sí tiene esa cosa sexy y provocadora, tanto arriba como abajo del escenario. Hay gente que lleva eso en el ADN y eso pueda confundir a otras personas, a mí, al asistente...
l Pero no tenés 10 años y sabés diferenciar si la actitud provocativa de Sabrina con vos es porque tiene otras intenciones detrás, ¿no?
-Puede ser, no está mal lo que decís. Lo que pasa es que yo voy como un caballito: hago lo mío y me vuelvo. Pero fuera de eso, como hombre, hasta en un boliche sabés cuando una chica te esta provocando, aunque no se te regale.
l Y en el caso de Ravelli, ¿qué ves?
-Sabrina es muy sexy, pisa fuerte el escenario, como actriz se está formando, tiene un muy buen cuerpo, que se cuida en lo que come y demás porque lo veo en la gira donde uno comparte mucho con sus compañeros. El puente que nos desune es Matías Alé. El límite es el compañerismo con Matu, ¿queda claro? Sabrina sería tranquilamente una persona que elegiría. Es una mujer que insisto con la palabra, tranquilamente, puede ser la madre de mis hijos. Por lo sexy y por actitudes cariñosas que tiene en la gira. Y ahí uno como hombre puede proyectar e imaginarse como sería formar una familia con ella.
l ¿Te arrepentís de no haber enamorado a Carmen Barbieri, que está en pareja con un hombre de 31 años?
-Hubiese estado buenísimo haberla conquistado yo, pero no saldría con alguien con la que hay diferencia de edad. Además, con Carmen siempre fuimos por un camino distinto, es mi madrina teatral. Es la mujer que me ha dado mi primera oportunidad en el teatro de revista, que me acompaña en cada paso que doy, me orienta. Para mí su opinión es respetable y siempre le presto atención.
l El año pasado estuviste en pareja con la actriz Sabrina Carballo, que trabaja en Señores Papis. ¿Hoy estás solo?
-Hoy estoy soltero, con Sabrina ya llevamos un tiempo largo separados. Ya hace un tiempo que vengo cayendo en la cuenta de que me quiero poner las pilas y salir de ese estado. Reconozco que, a veces, manejo mal la libido. Cuando estoy laburando, pongo mucha energía, voy para adelante como si fuese un caballito y me focalizo solo en eso pero me estoy abriendo para repartir la energía, para que el trabajo y la vida sea más equitativa. Días atrás, hablé con mi viejo, en esas charlas lógicas y no tanto que se pueden tener por la situación que atraviesa, y me dijo el nombre que quería que le pongo a mi hijo. Pascualito me pidió que lo llamen porque era el nombre que le iban a poner a él. Le dije que no me viniese con cosas raras, que a mi hijo quiero ponerle un nombre más normal. Hoy vivo solo y me gustaría compartir mi vida con alguien. Compartir el mate, si tuve un día rayado que me dé un consejo o al revés. Una compañera a la que hacerle el té, jugar con el perrito, ayudarla a que le vaya bien en el laburo. Insisto, tengo ganas de compartir mi vida. Siempre me imagino con mi hijo yendo al canal o teatro. Y soy de los que va a querer que mi hijo siga esta carrera. Y me gustaría que mi viejo y mi vieja puedan disfrutar de sus nietos. Vengo de familia tana. Viví eso y quiero seguirlo y protagonizarlo con mi mujer e hijo. Si no nos quedamos siempre en lo frívolo de la carrera.
l Ese es un gran peligro, ¿no?
-Esta una carrera tan individual que te lleva a pensar en todo solo. Y la realidad no es así. Uno se disfraza para salir al escenario. Después, te sacás todo, volvés a tu casa y ahí está la posta. Lo verdadero esta en cuando cerrás la puerta de tu departamento o casa y ves con lo que te encontrás. Y eso es lo que estoy entendiendo.
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