En Minuto para Ganar, Marley se dio un gusto y llevó como invitado especial a su hijo Mirko. Y, más allá del carisma y la simpatía, el bebé dejó en claro que posee otra cualidad de su padre. ¿Cuál? La de convertir un blooper en un momento televisivo muy efectivo.
Antes de comenzar uno de los desafíos del show, el instagramer de apenas un año se divertía con unas pelotitas. Y, como era de esperar, la tentación fue muy fuerte: Mirko tiró el recipiente y las pelotitas coparon el estudio. "Nooo", grito un sonriente Marley.
Inmediatamente, la tribuna festejó el acto del pequeño.
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