"El día que decido irme de mi casa, que agarro el bolso y me voy, ella me pide inmediatamente: 'llamá a las nenas y deciles que nos separamos'. Las siento, les digo que papá se va y se largan a llorar de una manera desconsolada. Yo durante mucho tiempo creí que lloraban de pena porque me iba. Pero, no hace mucho, en un viaje, charlando relajados, les pregunto 'por qué lloraron tanto' y me dijeron 'porque nos dejabas solas y teníamos miedo que nos matara", reveló el conductor de Intrusos.
Rial destacó que el testimonio de su ex, quien había dicho que sus hijas, por ser adoptadas, tenían tendencia a robar, "ya dejó de ser contra mí, contra mis hijas". "Me acaban de llamar y en tribunales de menores hay un revuelo muy grande, hay particulares y organizaciones que están presentando causas para ver qué se hace en contra de esto. Traspasó lo personal", afirmó.
El conductor contó, además, que luego de haberse quebrado en el programa de González Oro "fue llegar y abrazarlas. En este momento no hago terapia y la verdad que necesito. Hay un colegio y una clínica montadas en mi casa para mi hija y tengo un montón de cosas en la cabeza y a veces dejo de lado cosas personales".
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