No hubo velatorio ni pomposa despedida, César Mascetti -quien murió este martes a los 80 años- había pedido que su último adiós sea íntimo, familiar y en su querida San Pedro.
Eso sí: fiel a sus orígenes como periodista gráfico y como buen comunicador que fue, dejó una carta que este miércoles leyó ante los presentes Sandra Mihanovich, hija de Mónica Cahen D'Anvers, quien fue su compañera por más de cuatro décadas.
"Estoy a punto de vivir la mejor muerte, en el andén me espera mi familia para darme la mano", hizo a modo de introducción Sonsoles, la hija de la pareja de Sandra, quien luego tomó la palabra.
"Él se subió a su escritorio de la calle Salta, que era de su tío, se sentó y se puso a escribir porque necesitaba organizar y decir todo lo que pensaba. Escribió esto, y lo mejor que podemos hacer hoy es despedirlo con sus propias palabras", dijo Sandra ante los amigos que se acercaron a darle el último adiós a El Gaucho en el cementerio sanpedrino.
"Me estoy muriendo en San Pedro rodeado de durazneros en flor y de naranjos que esperan su turno para dejar caer pétalos e inundarnos a todos de perfume. Estoy en medio del campo caminando con mis perros, que perciben desde hace días lo que va a pasar", comienza el texto.
"Estoy mirando el río, escuchando las campanadas que escuchaban mis abuelos. Estoy por ver volar a las palomas que cubrirán el cielo, como todas las tardecitas. Dentro de poco me llevarán con ellas para enseñarme el camino", siguió la cantante con emoción.
"Me estoy muriendo en San Pedro a los 80 años, donde siempre quise morir junto a la mujer que amo, abrazado a mi familia, ¿qué más puedo pedir? Me estoy muriendo en paz, con la satisfacción del deber cumplido. César, 12 de septiembre, 2022", concluye el texto.
"Se fue con la satisfacción del deber cumplido, fue un buen sanpedrino, un buen argentino y ojalá tuviéramos muchos argentinos así", añadió la intérprete quien le agradeció de parte de su familia a la prensa por cómo trató la muerte de su padre a quien definió como un hombre "extraordinario"; a pocos metros estaba Mónica contenida de su hijo Vane, junto al cajón, rodeada de sus amigos.
Hubo lágrimas pero también espacio para para los aplausos, una suelta de palomas (Mascetti era colombófilo) y la música; la propia Sandra Mihanovich le regaló a su "Tata" (como ella y su hermano le decían) la canción "Por tu ausencia", que es de su autoría. La letra dice:
Algunos años han pasado ya,
Y mi corazón no deja de llorar
Por tú ausencia, por tú ausencia.
Y no comprendo yo
Porque te llevo dios
Y te quito de mí.
También te quiero yo
Sin ser tú creador
Naciste para mí.
Yo te canto de corazón
Yo te canto con mi voz,
Yo te canto de corazón
Yo te canto con mi voz.
Y si me falta la voz
Yo te canto con las manos
Y si me faltan las manos
Yo te canto con el corazón
Y si me falta el corazón
Es que en cielo estamos los dos.
Lamentándose están ya
Las cuerdas de aquella guitarra,
Y tú con tus manos tocabas
Y yo la escuchaba.
Y aquel pajarillo escondido
Cantaba y cantaba,
Mientras yo soñador como siempre
La ventana miraba.
Y ya no me hago reproches
Pues ya no te tengo
El Señor ha querido
Que vivas con el en el cielo,
Y yo como siempre me quedo
Llorando y cantando,
El destino ha querido
Tener a los dos separados.
Yo te canto de corazón
Yo te canto con mi voz,
Yo te canto de corazón
Yo te canto con mi voz.
comentar