Daniel Osvaldo tuvo un domingo negro al errar un penal con Aldosivi y pese al consuelo de su mujer, Jimena Barón, el jugador de Boca no puede salir de los líos de polleras. Su ex mujer, Nina Oertlinger, presentará hoy una denuncia penal y por estafa fiscal contra el padre del hijo de ambos durante su trunca relación, Gianluca.
Ayer en el programa Infama se anunció que al delantero de Boca Juniors le esperan más días negros antes de su partida obligada a Italia porque el contrato con Boca era sólo por seis meses.
Los abogados de la ex de Osvaldo, cansados de lo que consideran "incumplimientos" del jugador como padre, avanzan con un duro ataque en la Justicia. La situación económica de Nina es muy complicada y sobre ella pesa una orden de desalojo por lo que ella y su hijo se quedarían sin casa. Osvaldo en todo momento se habría negado a comprar una vivienda para el hijo.
Según trascendió, los abogados de Nina afirman que el jugador declaró "un ingreso mensual de 120.000 pesos. Pero los facultativos averiguaron que su sueldo es de 167.800 dólares mensuales, el contrato con Boca que lo une sólo por seis meses asciende a un millón y medio de dólares, tiene una cuenta no declarada en Suiza y sus bienes los tiene a nombre de su hermano y su padre", contó ayer Rodrigo Lussich en Infama (América).
Días atrás, entre Nina y Daniel Osvaldo se fijó una audiencia de conciliación para llegar a un acuerdo, pero, según los abogados de Nina, "Daniel Osvaldo no se presentó porque no tenía ganas, iban a estar los paparazzis y no quería pelearse nuevamente". Un mes atrás el jugador tuvo un percance con un fotógrafo de la revista Paparazzi, quien lo siguió hasta Lanús, barrio de la familia del crack de Boca, en plan de obtener una imagen con una supuesta tercera en discordia, en medio de una crisis con su actual mujer, la actriz Jimena Barón.
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