Este jueves se estrenó Warcraft, una película basada en un exitoso videojuego que busca romper con el gran mito de que la gran mayoría de estos productos son de mala calidad. Acá te mostramos los cinco ejemplos que más contribuyeron a la construcción de esta mala fama
Filmada en los Estados Unidos, la película cuenta la historia de un hombre que explota al estilo "Un Día de Furia" pero con una gran incoherencia en casi todos los aspectos del guión que de seguro hizo que varios espectadores pidieran un reembolso de las entradas a los 10 o 15 minutos de empezada la proyección.
Si Wing Commander se hubiera quedado en sus varias entregas para las consolas SEGA o PC. De seguro hubiese mantenido su prestigio, ganado en base a una historia que incluía varias escenas filmadas con actores entre batalla y batalla.
Pero al creador del juego, Chris Roberts, se le subió el cineasta a la cabeza y se animó a dirigir una versión para cine de su obra maestra, que estrenó a semanas de uno de los lanzamientos más esperados de 1999: Star Wars Episodio I.
Como era de prever, el público ignoró esta película y los pocos que lo fueron a ver no lo recomendaron por lo que en muy poco tiempo era posible verlo en canales de cable.
Uwe Boll, que ostenta el récord de ser el director que mayor cantidad de filmes con bajas calificaciones de la crítica y poca taquilla, también se destaca en esta nota con otras de sus "obras", en este caso el de una película del género de terror fantástico.
La historia narra como Dhampir (Kristanna Loken, la terminatrix de Terminator 3), una híbrida entre humano y vampiro -muy original esto- se enfrenta a su padre, un rey vampiro que ha juntado un ejército para conquistar a la humanidad.
Con eso, y el tráiler ya hay material suficiente para saber porqué figura en este ranking.
A 22 años de su estreno, todavía no hay nadie que haya explicado oficialmente porqué Nintendo, la compañía más exitosa de los videojuegos hasta la aparición de la Playstation, se animó a producir un filme basado en su piedra fundamental.
Lo cierto es que, promocionado por una bella canción de Roxette, se estrenó un día esta suerte de relato sin sentido que protagonizaron el finado Bob Hoskins y John Leguizamo y que nadie, ni siquiera su director, pudo tomarse en serio. Para darse una idea de la tragedia que esto representó, basta saber que de los 48 millones de dólares de presupuesto, sólo recuperó 20 en la taquilla.
Si bien este puesto le corresponde a Super Mario Bros, esta película basada en uno de los fichines más exitosos e imitados de los años ´80 le gana el puesto por el simple hecho de haber pasado tan inadvertido que mucha gente desconoce aún su existencia.
Los hermanos Billy y Jimmy Lee (apellido chino pero interpretados por los actores occidentales Scott Wolf y Mark Dacascos) deberán evitar que Koga Shuko (Robert "Terminator 2" Patrick, otro caso de apellido incongruente) junte las dos partes de un amuleto que le dará grandes poderes.
Sólo 2 millones de dólares de recaudación, y una edición en VHS local a cargo del editor de la colección de videos de Revista Caras, justifican este primer puesto.
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