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Algunos aludidos directamente y otros insinuados por las polémicas declaraciones de Jaitt devolvieron gentilezas a Mirtha cuestionando el llevar a una persona que los ensució sin mostrar pruebas.
La invitación de Natacha Jaitt a la mesa del sábado pasado de Mirtha Legrand no sólo lastimó a las víctimas de las bombas que arrojó la mediática sobre el caso de red de trata de jugadores de las divisiones inferiores de Independiente (en las que Jaitt involucró a empresarios y periodistas) sino que incendió a la misma Mirtha, que ahora es blanco de críticas por los aludidos.
Este lunes, Mirtha Legrand se llamó a un silencio estricto y se peleó con la producción. Según informó Carlos Monti en Pamela a la Tarde (América): “A las dos de la mañana del domingo (Mirtha) encaró furiosa a una productora: ‘Vos sabés que siempre me opuse a esta invitada. Las críticas que estoy recibiendo son terribles. Me están haciendo daño’”, dijo la Chiqui.
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Horas antes del ciclo, el productor general de La Noche de Mirtha Legrand (sábado, a las 22, por El Trece), Nacho Viale del Carril, nieto de la diva, escribió: “Llamen a los bomberos, va a salir fuego de esta #mesaza”.
El nunca pensó que esa típica frase hecha para vender el programa se le iba a volver en contra. Es que durante el domingo y el lunes, casi todos los periodistas de América salieron a “pegarle” a la producción de Mirtha por el poco profesionalismo de llevar a una persona a “manchar colegas” sin pruebas.
Eso sí, Mirtha no se las agarró con “Nachito” pese a ser el máximo responsable de la producción. El hilo se corta por lo más delgado.
Natacha Jaitt prendió el ventilador dando nombres de famosos y periodistas que estarían involucrados en el tráfico de sexo de chicos menores de edad.
Entre los mencionados aludió a un periodista político que trabajó hasta el año pasado en TN con la sigla CP, un productor de Combate llamado MG, el periodista político Juan Cruz Sanz, hoy panelista de Cortá por Lozano (Telefé), Alejandro Fantino y la directora de contenidos de América, Liliana Parodi, quien según Natacha Jaitt “sabe todo”. Ni siquiera el humorista Enrique Pinti se salvó de ser mencionado por Natacha.
En boca de Natacha, el relacionista público Leo Cohen Arazi, uno de los presos de la red de trata de menores en el club Independiente, era quien reclutaba a los concursantes de los realities de Gran Hermano y Combate “a cambio de favores sexuales” y señaló que la misma modalidad se extendió al mundo periodístico masculino.
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Luis Majul en La Cornisa (América) atacó a Mirtha por el tenor de las declaraciones de Jaitt: “Quiero hablarle a Nacho Viale, con quien tengo una buena relación, y también le quiero hablar a la señora Mirtha Legrand, porque lo que pasó en el programa era esperable, porque ella venía anunciando, en una especie de intento de extorsión, a ver qué nombre revoleaba”.
Y remató: “Sé que Mirtha dice que está más allá del bien y el mal, pero lo que hicieron ayer en la tele (por el sábado) no se hace. Se sabía que iba a la tele a ensuciar gente sin prueba”.
Luis Novaresio en su ciclo Debo Decir (América) siguió los mismos pasos que Majul: “Quiero solidarizarme con mis compañeros, quienes fueron injustamente agredidos sin ningún tipo de prueba. La producción tiene la responsabilidad de lo que se pone al aire”. El lunes por la mañana, Antonio Laje se sumó: “Lo que pasó en el programa de Mirtha a mí me parece, no sé si patética es la palabra, pero me parece muy grave”.
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