El actor Jean Rochefort, una de las figuras más populares del cine francés, falleció este lunes por la madrugada en París a los 87 años.
Ecléctico y apasionado, y considerado como la encarnación perfecta del “gentleman” a la francesa, Rochefort era reconocible por su bigote poblado, sus aires de seductor con sentido del humor y sobre todo por su timbre de voz único, grave y penetrante.
“Formo parte del patrimonio (francés). Está el jamón de Bayona, (los actores Philippe) Noiret y (Jean-Pierre) Marielle, y yo”, bromeaba el intérprete de la inolvidable “El marido de la peluquera”.
Rochefort trabajó en cerca de 150 películas bajo las órdenes de directores como Bertrand Tavernier, Patrice Leconte y el español Fernando Trueba.
El actor, cuyo estado de salud se había agravado en el último año, fue galardonado a lo largo de su carrera con dos premios César - los equivalentes al Oscar del cine francés - por su papel en Que empiece la fiesta, de Bertrand Tavernier, y El cangrejo tambor, de Pierre Schoendoerffer; y además recibió un César honorífico.
Pese a su reputación de actor cómico, Rochefort era difícil de clasificar, con una apariencia a la vez convencional y de “chilflado” - como aseguraba Patrice Leconte -, y una participación tanto en filmes para el gran público como en el cine de autor.
Se metió en la piel de todo tipo de roles y destacó además en películas como Las tribulaciones de un chino en China de Philippe de Broca, Un elefante se equivoca enormemente de Yves Robert y Tandem de Leconte.
Tras rodar con Trueba El artista y la modelo (2012), inspirada en el escultor Aristide Maillol, Rochefort afirmó que dejaba el cine, aunque todavía rodó una vez más en la película de Philippe Le Guay Floride (2015), donde encarnaba a un anciano enfrentado a problemas de memoria.
“Jean era un hombre elegante en su forma de actuar, de ser, de reír contigo, de soñar contigo”, comentó el guionista Jean-Loup Dabadie a la radio francesa France Inter.
Rochefort, nacido en París en el seno de una familia burguesa, había ingresado en el Conservatorio en los años 1950, con JeanPaul Belmondo, Jean-Pierre Marielle, Bruno Cremer y Claude Rich como compañeros de promoción.
Sobre la muerte, Rochefort declaró en 2015 en televisión que “la sentía venir”. “Hay momentos en que estoy contento de que llegue. El cuerpo me lo pide, la cabeza a veces también. Pero uno tampoco quiere entristecer a los demás”.
Padre de cinco hijos de tres mujeres diferentes, Rochefort lamentaba haber sido un “mal padre” volcado en su carrera.
comentar