Mientras las miradas estaban puestas en la separación-reconciliación de Wanda Nara y Mauro Icardi, apareció Maxi López a mostrar su costado paternal y conciliador y -lejos de la polémica- disfrutó de los tres hijos que tiene con su exesposa.
El exjugador, de 37 años, cobijó a sus hijos en su casa de Italia mientras Wanda y Mauro dirimían sus diferencias de pareja con alto perfil y mucha exposición en las redes sociales. Acompañado de su novia, la modelo sueca Daniela Christiansson, Maxi se dio el gusto de ser papá a tiempo completo, jugar al fútbol, pasear, cocinar y compartir tiempo perdido con Valentino, Constantino y Benedicto.
Tiempo que le fue negado en un conflicto con la madre de los chicos, en lo que fue una pelea de la que hoy sólo quedan los escandalosos títulos en las revistas del corazón.
Maxi y Wanda se han reconciliado y hoy el posteo del exdelantero del Milan, Sampdoria y Torino lo deja en claro: "No puedo describir en palabras estas últimas semanas, después de muchos años tener la posibilidad de compartir todo este tiempo juntos hace que mi vida esté llena de felicidad. Me pone contento que podamos nuevamente ayudarlos a crecer junto con su mamá @wanda_icardi, el mayor regalo es una vida llena de paz, amor y serenidad para ustedes. Gracias @danielachristiansson que te bancas a estos 4 terremotos juntos siempre con tu apoyo incondicional y una sonrisa".
Y dice cuatro terremotos porque el cuarto es el perro, que aparece también en una de las fotos, un hermoso ejemplar de la raza Akita. En el resto de las fotos que acompañan el posteo se los puede ver a los varones López comiendo, durmiendo abrazados, jugando al fútbol y disfrazados para Halloween.
Como muestra en sus stories de Instagram, esta mañana Maxi dejó a los chicos López en la escuela en París, en lo que es el primer día de clases luego del receso, y emprendió el retorno a su casa después de vivir días felices. ¿Habrá pasado la crisis Nara-Icardi? Ya lo sabremos.
comentar