¿Qué es de la vida de Lanchita Bissio?

La popularidad y el éxito que alcanzó Marcelo con Video Match y luego sumando Ritmo de la Noche, lo transformaron ya no en un simple compentarista de deportes, sino en una figura que se metió en el corazón de la gente y que durante esos primeros años del programa lo tuvieron bajando del "tira goma" y hasta disfrazándose de "Tarzan" para hacer una serie cómica que se grabó en el Tigre.

Lanchita dejó el programa en 1993 y de a poco se fue perdiendo del dominio popular y eso en algún punto lo afectó. Con el amor de su familia, la compañía de su mujer y sus hijos, logró reencausar el rumbo y hoy, a los 60 años, disfruta de su trabajo en los medios y es uno de los más escuchados todas las mañanas en Villa Carlos Paz. Todas las mañanas hace "El Bissio de la Mañana" y además tiene un programa de entrevistas. Lanchita Bissio, una vida para contar...

-Fue casi de casualidad. Yo en ese momento había dejado de correr en lancha y tenía una hermosa amistad con Daniel Scioli. Justo me entero que en Telefé habían arrancado un programa de deportes a la medianoche y me fui con los casette para mostrar lo que podía hacer. Todos esos casette eran de Daniel, obviamente que en Telefé dijen que eran míos, y me tomaron una prueba y quedé...

-¿Imaginaste el cambio que tuvo el programa y el éxito que alcanzaron?

-Fue mucho, es cierto, pero Marcelo siempre supo lo que quería. Hoy que él haya llegado donde llegó no me sorprende para nada. Y fijate que ninguno de los integrantes de todas las épocas que estuvieron con Marcelo la pasa mal. Nadie se caga de hambre, cada uno siguió su camino y llegó a laburar bien. Eso habla de la calidad de Marcelo y de lo que teníamos cada uno para dar.

-¿Se extraña aquella época?

-Por ahí se extrañan las reuniones, las charlas, los viajes. El haber jugado con Maradona y salir campeón, eso es algo que hoy le cuento a mis nietos. Pero creo que cada cosa a su tiempo. Fue un momento fantástico, hermoso, nosotros éramos todos amigos y creo que ese fue él éxito. Pero todo cambió, hoy Marcelo no tiene relación con los elencos con los que trabaja, antes terminábamos y seguíamos juntos en todos lados. Eramos amigos realmente y eso se notaba. Los famosos asados en el campo, las giras con Ritmo, todos arrancamos en el mismo lugar. Me acuerdo una noche Marcelo pinchó una goma del 505 y no tenía auxilio, así arrancamos todos...

-La exposición del programa era mucha hasta que un día te fuiste ¿Cómo fue pasar por el período donde salías a la calle y ya no tenías los beneficios de ser un integrante de Video Match?

-La pude pilotear, eh pasado por momentos muy feos, es cierto. Fue un año y pico que la pasé muy mal. A mi me dio Dios varias posibilidades y me di cuenta que la estaba pifiando. Tenía que volver a ser el de toda la vida. Cuando vine a Córdoba me tocó empezar de cero y hoy recuperé mi casa, tengo laburo y una familia hermosa. No fue una etapa fácil la de superar la salida del programa, pero gracias a mi mujer y a mis ganas de salir adelante hoy puedo contar aquella experiencia. Todo sirve en la vida y yo lo rescato.

Lanchita no la pasó bien y él no lo niega. Fue una etapa en la que se encerró en sí mismo y las tentaciones de la noche hicieron que de a poco se vaya alejando de los medios, perdiendo laburos y perdiendo esa frescura y simpatía que lo habían caracterizado. Pero llegó el año 2001 y de repente las cosas comenzaron a cambiar para su vida. Justo cuando el país se prendía fuego, De la Rúa abandonaba el poder, Lanchita decidió irse a probar suerte a una Villa Carlos Paz que por entonces era una plaza más del Interior. Hoy, casi 15 años después, logró salir adelante, tiene un nombre fuerte en los medios y ni piensa en volver...

-¿Cómo fue la llegada a la Villa?

-Me vine hace 15 años y hoy estoy haciendo radio y televisión. Estoy en una productora muy buena, que creció mucho y me tratan muy bien. Tengo en la radio el horario central de la mañana (9 a 13.30). Además en el verano hacemos cobertura de la temporada y tengo un programa en el que entrevisto a los actores. Ya me siento parte de la Villa. Cuando llegué había 40 mil habitantes. Hoy está cerca de los 90. Yo me instalé en San Antonio que es uno de los pueblos que forman Carlos Paz y es otra vida...

-¿Pensaste en volver?

-No, me quedo acá, por ahí me preguntan si a Marcelo le agarra un ataque y dice quiero que vuelvan todos... Yo voy, lo saludo, le doy las gracias, hago un programa, pero no me muevo de acá. Tengo 60 años y uno está en la recta final de su vida. Ya armé todo lo que quería, ahora que Dios me ayude con la salud para poder disfrutar de esto. No vuelvo más...