Después de que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) dispusiera la finalización de todas las competencias y la suspensión de los descensos, Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA) emitió un comunicado en el que cuestiona la batería de disposiciones porque, entre otras consideraciones, atenta contra los intereses de sus afiliados.
“Con la aplicación de esta medida se estaría poniendo en riesgo la fuente de trabajo de un gran número de futbolistas”, sentencia el comunicado del gremio, que además remarca que cuando las autoridades sanitarias permitan la vuelta a las prácticas la AFA “tendrá la obligación de mantener abierto el libro de pases”.
El gremio dirigido por Sergio Marchi requirió en el documento que los clubes deben dar “estricto cumplimiento a las obligaciones asumidas en todos los contratos -registrados y no registrados-, especialmente relativas al pago íntegro y puntual de las remuneraciones pactadas” , en lo que se considera un preámbulo de un reclamo que se concretará en los próximos días: intimaciones a aquellas instituciones que no cumplan.
Fuentes del gremio le adelantaron a DIARIO POPULAR que “más de un 75 por ciento” de los clubes traspasaron el límite de tolerancia convenido para las deudas previsionales. “Hablan de la responsabilidad social de los clubes y hacen lo mismo que esos empresarios inescrupulosos que no pagan o lo hacen en cuotas”, comparó el interlocutor del gremio.
Marchi: "Los futbolistas no están de acuerdo en una temporada 21 sin descensos"
Tras la difusión del comunicado, el secretario general de Presidencia, Pablo Toviggino, se encargó de retrucar la exposición y en declaraciones periodísticas salió al cruce de Marchi. “AFA empezó a trabajar en un conjunto de medidas que incluía a los jugadores, y a esta situación de que en junio expiran 2 mil contratos. Le hicimos una propuesta al gremio que nunca contestó”, explicó el dirigente que también preside el Consejo Federal.
“Básicamente le aseguraba a él seis meses más de contrato a cada uno de los jugadores que quisieran renovar. Pasaron los días y no hubo más contacto”, finalizó Toviggino en declaraciones a TNT Sports.
El comunicado completo del gremio:
Las excepcionales circunstancias que afectan a la población mundial a raíz de la propagación del COVID-19 y que involucran, también, entre muchas otras, a la actividad futbolística de nuestro país, tornan imperioso el cumplimiento por Futbolistas Argentinos Agremiados de su objeto estatutario, consistente en la defensa de los derechos e intereses de todos los y las que, como futbolistas, participan de la misma, priorizando, en este caso, el resguardo de la vida y la salud de este colectivo de trabajadores, por sobre el eventual regreso a los entrenamientos, previos a la reanudación de los torneos.
Ello justifica el requerimiento que aquí se deja formulado, dirigido a todos los clubes afiliados a la Asociación del Fútbol Argentino de las distintas categorías profesionales, de dar estricto cumplimiento a las obligaciones asumidas en todos los contratos -registrados y no registrados-, especialmente relativas al pago íntegro y puntual de las remuneraciones pactadas en los mismos.
En el supuesto que las autoridades nacionales autoricen la vuelta a los entrenamientos, la autorización deberá ser acompañada por las condiciones de protección de la vida y la salud de los y las futbolistas a cumplir ineludiblemente por los clubes, como condición sine qua non de reanudación de la actividad, bajo apercibimiento de las respectivas sanciones aplicables, en caso de inobservancia de las mismas.
En la ocasión pre mencionada, la Asociación del Fútbol Argentino tendrá la obligación de mantener abierto el libro de pases.
Por último, con respecto a la resolución dispuesta por la Asociación del Fútbol Argentino en el Boletín Nº 5768, relativo a la eliminación de los descensos en la próxima temporada 2021, en forma completamente inconsulta con Futbolistas Argentinos Agremiados, la misma deviene irrazonable y contraria a la dignidad de los y las futbolistas, y al mismo tiempo claramente perjudicial de sus derechos, produciendo una pérdida en la competitividad del fútbol argentino, la cual siempre debe ser la razón de ser de este deporte. Sumado a ello, no debemos pasar por alto que con la aplicación de esta medida se estaría poniendo en riesgo la fuente de trabajo de un gran número de futbolistas, con todas las consecuencias que de ello pudieran derivarse.