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A pedido de Coudet, su flamante entrenador, el Tijuana haría un esfuerzo económico para llevárselo en este receso, en una operación que le dejaría siete millones de dólares limpios a la Academia. ¿Chau Pantera?
Esta vez, va en serio. No se trata sólo de un rumor o de conversaciones informales, de las que fueron moneda corriente en el pasado.
Porque en todos los mercados de pases, desde que fue figura en el equipo campeón de Racing en 2014, se habló de su transferencia al exterior, pero nunca se concretó nada.
Lo que cambia ahora es que la dirigencia de la Academia le dio la palabra de no desechar ninguna buena oferta que llegue por su pase y parece ser que el Tijuana de México, donde acaba desembarcar Eduardo Coudet, está dispuesto a satisfacer las necesidades económicas del club de Avellaneda, y por eso la partida de la Pantera está más cerca de nunca, y podría resolverse antes de fin de mes, en una operación que dejaría en la tesorería albiceleste siete millones de dólares “limpios”.
Apenas fue contratado por Tijuana, Coudet marcó como prioridad para los refuerzos, dos jugadores del medio argentino: Damián Musto, de Rosario Central, y Gustavo Bou, de la Academia.
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Encima, Cristian Bragarnik es la persona ideal para acercar las partes, pues está de los dos lados del mostrador, pues representa al goleador, al técnico y es asesor deportivo de la entidad azteca. Ya hubo contactos informales, el tema está encaminado y sólo faltaría llevar lo conversado a los papeles, para que se concrete la transferencia, que el atacante (que hoy en día se recupera de un desgarro) tanto anhela, para asegurar su futuro.
Y en la jornada de ayer, hubo otra novedad en torno a desvinculaciones. Porque Estudiantes se quedaría con Gastón Campi, que está a préstamo en Rafaela, por 800.000 dólares, por el 80 por ciento del pase.
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