El conjunto que dirige Gerardo Martino tuvo un flojo desempeño, y cayó sin atenuantes ante el equipo conducido por Dunga, que tuvo en Neymar a la gran figura de la cancha.
Su contracara fue Lionel Messi, que nunca pudo imponer su juego y hasta falló un penal en el primer tiempo, lo que pudo haber sido la igualdad transitoria del conjunto argentino.
Argentina mostró un buen nivel en los primeros 15 minutos de juego cuando, de la mano de Messi, arrinconó a Brasil y tuvo las mejores situaciones, mal resueltas por el Kun Agüero y Ángel di María.
Pero con el correr de los minutos, el equipo dirigido por Dunga fue recuperando la pelota y poco a poco fue acercándose al área de Chuiquito Romero.
Fue así que a los 28 minutos llegó la apertura del marcador para la verdeamarelha: tras un centro frontal, Fernández y Zabaleta se chocaron al intentar despejar de cabeza, y Diego Tardelli aprovechó el rebote y sacó un tiro esquinado, que venció la débil resistencia de Romero.
A partir de allí, Brasil fue amplio dominador, y pudo aumentar el marcador, pero Neymar falló de manera increíble un mano a mano con Romero.
Sobre el final de esa etapa, el árbitro sancionó una falta inexistente dentro del área brasileña y sancionó penal. Sin embargo, el arquero Jefferson adivió la intención y le contuvo el remate a Messi.
Ya en el segundo tiempo, Martino buscó más profundidad con los ingresos de Pastore y de Higuaín, pero enseguida, a los 18 minutos, otra falla defensiva tras un córner desde la izquierda le permitió a
Tardelli, de cabeza, anotar el segundo tanto para Brasil.Ese segundo tanto fue el golpe final para Argentina, que nunca encontro los espacios para inquietar a la defensa brasileña y, desordenado, dejó muchos espacios que no fueron aprovechados por los delanteros brasileños.