"Estábamos en el hotel y la gente de seguridad nos avisó que había hinchas, en la puerta. Yo, como líder del grupo, bajé y ahí mismo me di cuenta que toda la seguridad estaba intranquila. Sí, no la niego, la charla duró siete minutos, después se fueron. Al bajar noté que eran 30 ó 40 monos. Cuando me avisaron que había hinchas, pensé que eran 10". El entrenador de Boca no dio detalles sobre el contenido de la charla.
Una vez aclarada esta cuestión, sí se dio espacio al tema futbolístico. En ese orden, Arruabarrena reconoció la presión que tienen de ganar algo antes de fin de año. "La idea es la misma que el semestre pasado, ser protagonistas. A pesar de que haya otros nombres y que puedan cambiar algunas características, tenemos que ser dinámicos, veloces y tener el balón. Siempre está presente la exigencia y la obligación. Hace tiempo que no ganamos un título y la presión la tenemos siempre porque somos el club más grande del país", destacó.
Para conseguir dar una vuelta, el as bajo la manga es Carlos Tevez. Con respecto al Apache, el Vasco aseguró: "Carlos demostró en estos últimos años que se siente más cómodo jugando con un nueve por delante. Al recibir un jugador que viene de pelear todos los torneos que jugó, tengo que aprovecharlo. Su llegada es lo más importante por cómo está. De los últimos tiempos es el regreso que la gente más esperaba. Físicamente está bien, tiene un físico privilegiado y el martes nos juntaremos para ver cómo está".
De las declaraciones de Juan Román Riquelme, con críticas al equipo y sus duelos ante River, dijo el Vasco que le parecían "lógicas, pero si tengo algún problema con él lo llamo por teléfono".
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