Este 2014, que está terminando, les deparó satisfacciones y alegrías, en algunos casos inéditas para sus hinchas, a cuatro de los cinco clubes denominados grandes del fútbol argentino. De ellos, Boca fue el único que quedó en deuda con sus simpatizantes, ya que a la hora de los festejos se quedaron con las manos vacías y sin poder aplaudir ningún logro ni título.
Encima como los boquenses ya acarrean dos años sin dar una vuelta olímpica (la última fue en 2012 en la Copa Argentina) el equipo del Vasco Arruabarrena deberá soportar una presión extra durante el año próximo en el cual atenderá varios frentes y compromisos al mismo tiempo.
El primero de ellos será el partido de la repesca ante Vélez por un lugar en la fase de zonas de la Copa Libertadores. En caso de ganarlo irá al Grupo 5 y si pierde deberá afrontar el repechaje contra Independiente del Valle de Ecuador y ver qué pasa. Además, en la agenda xeneize figura el torneo de Primera División y más adelante la Copa Argentina.
Otro equipo urgido por volver a consagrarse campeón es Independiente, ya que si bien a mitad de año recuperó el orgullo y el lugar perdido en el círculo privilegiado del fútbol argentino, al ganarle un desempate a Huracán por el tercer puesto tras un año en la B Nacional, ya acumula cuatro temporadas sin ganar títulos. El último fue en la Copa Sudamericana 2010, torneo al que regresará en el segundo semestre del próximo año.
Para el resto de los grandes, el 2015 será un año más liviano o más bien para intentar repetir los logros conquistados en el que se está yendo. Por ejemplo, River acumuló estrellas al por mayor. Con Ramón Díaz salió campeón del torneo Final 2014 y posteriormente le ganó la Superfinal a San Lorenzo. Y después, en la segunda mitad, con Marcelo Gallardo al frente del equipo se adueñó por primera vez de la Copa Sudamericana, tras eliminar a Boca en las semifinales.
Para San Lorenzo, por su parte, el desafío mayor, más allá de su participación en los certámenes del fútbol local y en la Recopa Sudamericana que dirimirá justamente contra River, será defender el título de campeón de la Copa Libertadores de América conquistada por vez primera en su historia bajo la conducción de Edgardo Bauza y de una dirigencia que además puso las cuentas del club en orden.
Por último, 2015 marcará el regreso de Racing a las competiciones sudamericanas, ya que gracias al campeonato de Primera ganado con Diego Cocca como DT, impulsado por una racha final de seis triunfos consecutivos, dejando atrás una extensa espera desde 2001, se aseguró su participación en la Copa Libertadores doce años después.
Así, en 2015, cada equipo con sus objetivos atenderá su juego.