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Hoy puede ser campeón si Banfield no le gana a San Lorenzo y podrá, de una vez por todas, abrazar el tan anhelado título. Mientras sucede eso, Barros Schelotto está pensando en lo que se viene y no quiere que le desmantelen el plantel.
Es cierto que el mundo Boca hoy va a estar pendiente de lo que ocurra en el Nuevo Gasómetro entre San Lorenzo y Banfield, porque en caso de que el Taladro no consiga la victoria el equipo de la Ribera se coronará campeón de la Primera División. Pero mientras el hincha se prepara para ponerse frente al televisor a esperar una manito del ‘Ciclón’, Guillermo Barros Schelotto, el técnico del Xeneize, se rompe la cabeza planificando lo que será la conformación del nuevo plantel. ¿Quiénes se irán?. ¿Cuántos llegarán?. Un dilema que se irá resolviendo a medida que vayan pasando los días.
El Mellizo es consciente de que el rendimiento de sus principales figuras llamará la atención de varios equipos importantes del fútbol internacional y no quiere ni pensar en la chance de quedarse sin algunas piezas claves. Darío Benedetto, Cristian Pavón y Ricardo Centurión, por citar los casos más relevantes, aparecen en el radar de varias instituciones con un alto poder adquisitivo, por ende, intentar retenerlos será una ardua tarea para los dirigentes, que ya saben que Guillermo no quiere saber nada con perderlos.
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El Pipa se convirtió en el delantero del momento y unos de los grandes responsables para que esto ocurra es el técnico, que le bancó la titularidad cuando andaba con el arco torcido y éste terminó respondiendo al apoyo a puro gol. Y al hacerlos con la camiseta de Boca, tiene un rebote a nivel mundial que puede dejar secuelas para el Xeneize. Está claro que le van a llover ofertas con sumas desorbitantes y extremadamente difíciles de rechazar.
Lo de Pavón es un caso similar. Si bien no ha tenido la misma importancia que el centrodelantero, ha levantado muchísimo su nivel y en las últimas fechas ha mostrado su mejor versión. Lo quieren de Portugal y también en España. Tiene una cláusula de rescisión de 18 millones, aunque podría irse por un poco menos.
El caso de Centu es el más accesible y complejo a la vez. Es que Daniel Angelici, el presidente, ya avisó en su momento que pondría los 9 millones que costaría la totalidad de su pase, pero las cuestiones personales son un tema que complica la transferencia, por lo que su situación se resolverá antes de que se venza el préstamo.
Además, ya tiene en el anotador varios nombres para reforzar el equipo y puestos en los que el mismo DT considera vitales para animarse a soñar con logros importantes. Marcadores centrales, en la que figuran Paolo Goltz y Javier Pinola como primeras opciones, y también un mediocampista con juego, que podría llegar a ser Franco Vázquez (sin lugar en el Sevilla), del gusto del entrenador. También buscarán un ‘9’ y un lateral, en caso de que emigre Gino Peruzzi, resistido por los hinchas.
El tema arqueros parece que no será prioridad, al menos hasta diciembre. Agustín Rossi y Guillermo Sara pelearán por la titularidad y recién a fin de año se analizará el jugador que venga para pelear con ellos.
Por lo pronto, el Xeneize podrá hoy sumar una nueva estrella. Si Banfield no gana, Boca festejará por anticipado el título tan anhelado.