Fútbol
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A pesar de que en las horas previas habló de un posible retiro, Carlitos fue la gran figura, marcando los dos tantos xeneizes para el 2 a 2 ante un aguerrido Lanús. En la definición, el nuevo arquero se llevó todos los aplausos.
Con un Carlos Tevez inspirado y gracias a las manos salvadoras de Guillermo Sara, Boca logró la clasificación a cuartos de final de la Copa Argentina. Los noventa minutos se fueron con un 2 a 2 vibrante, pero en la definición por penales el xeneize no falló y su nuevo arquero se puso el traje de héroe.
Pasado de revoluciones, entrando en ese "juego" que propuso Lautaro Acosta con sus declaraciones en la previa, Boca fue un descontrol total en el primer tiempo. Todos salieron a la caza del Siete, y en la primera, tras un planchazo brutal de Peruzzi (era para tarjeta roja), llegó el tiro libre de Maxi Velázquez, la peinada de Braghieri y la aparición solitaria de Román Martínez en el segundo palo para empujarla al gol.
Un mazazo para el xeneize, que acusó el impacto, y una situación motivadora para Lanús, que desde ese momento tomó las riendas del partido. Mejor parado en el medio, muy concentrado en cada pelota, presionado en toda la cancha, el granate impuso superioridad, aunque sin llegar tanto a posiciones de gol.
Boca, en contrapartida, una sombra. Nervioso, sin hacer pie en ningún sector, vio como la pelota le pasaba cerca sin poder agarrarla. Mal Pablo Pérez, sin participación de Carlos Tevez, todo dependió de un pelotazo largo que siempre encontró bien parada a la defensa granate.
Cómodo en su rol de protagonista, Lanús manejó los tiempos, explotó con acierto la pelota parada y estuvo siempre más cerca. Como a los 27 minutos, cuando tras una subida de José Luis Gómez, la pelota derivó al medio para Miguel Almirón, quien tardó en acomodarse de zurda y remató alto.
El equipo del Mellizo reaccionó con algunos intentos individuales, pero sin una idea clara de juego. Y fue así como a los 31 minutos, luego de un desborde por derecha, Pavón remató cerrado y la pelota dio en el palo. En el arranque del complemento Boca pagó con la misma moneda. Encontró mal parado a Lanús, y tras una buena maniobra de Centurión por izquierda, la pelota le quedó a Tevez en la medialuna del área y con un derechazo la clavó contra el palo izquierdo de Monetti para establecer el 1 a 1.
Parecía que Boca podía reaccionar, sobre todo por lo que generaba Tevez, pero fue sólo un espejismo provocado desde el entusiasmo del resultado. Enseguida Sara tapó ante la entrada de Acosta, y como si fuese un aviso, a los 14 llegó otra pelota cruzada por un tiro libre de Silva y apareció solo Braghieri para poner el 2 a 1 de cabeza. Otro golpe, pero del que pudo salir rápido por una buena jugada de Pavón, con un centro rasante, taco de Benedetto, rebote en Monetti y otra vez Tevez para empujarla al gol y dejar la cosa 2 a 2.
En el final estuvo más cerca Lanús, pero todo se emparejó, sobre todo por la gran actuación de Carlitos. Después, en los penales, apareció Sara y el festejo fue para Boca.