A 25 años de la consagración de Boca en el torneo de fútbol Apertura 1992, Alberto José Márcico, un ídolo y emblema del club de La Ribera, calificó aquel logro como “el más importante” de su carrera.
“En Francia estaba cómodo, pero los colores tiran. Me crié en Barracas y de chico mi viejo me llevaba seguido a la cancha. Volví solo porque era Boca. Y hoy a la distancia estoy seguro que fue el título más importante de mi carrera”, confesó Márcico.
El correntino, de 57 años, regresó a Argentina luego de vestir la camiseta de Toulouse de Francia entre 1985 a 1992 y se erigió en el líder futbolístico del equipo que dirigía el uruguayo Oscar Washington Tabárez y que puso fin a una sequía de 11 años sin títulos en el ámbito local.
“Siempre fue difícil ganar un campeonato con Boca. Lo era en aquel tiempo y también lo es ahora. Se habían conseguido dos torneos internacionales (la Supercopa 1989 y la Recopa Sudamericana 1990), pero la gente quería un certamen local”, recordó Márcico, que inició su carrera en 1980 en Ferro Carril Oeste, donde obtuvo los Campeonatos Nacionales de 1982 y 1984.
Boca se consagró campeón el 20 de diciembre de 1992, tras igualar 1-1, de local, ante San Martín de Tucumán, y sumar 27 puntos, producto de diez triunfos, siete empates y apenas dos derrotas, con 24 goles a favor y 11 en contra.
“Había presión, en realidad siempre la hubo en Boca, pero en ese momento era más. Los hinchas tenían clavada la espina de la final perdida el año anterior con Newell’s. Y nosotros cargamos con eso. Jugamos un excelente torneo, más allá de las dudas del final”, explicó.
Márcico, un ex jugador dueño de una pegada excelsa y un juego elegante, sin embargo contó que nunca dudó en que el título se iba a quedar en La Boca.
Márcico señaló: “Teníamos un gran plantel, pero principalmente un equipo bien bostero, y sin dudas un gran conductor como el ‘Maestro’ Tabárez”, reiteró.
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