Central no pudo con Atlético y se llevó un empate amargo de Rafaela
El Canalla igualó sin goles con el conjunto santafesino y sumó un punto con gusto a poco. Por su parte, los locales cortaron una racha de dos triunfos al hilo.
Atlético de Rafaela y Rosario Central igualaron 0-0 en un aceptable encuentro que disputaron esta tarde en el estadio Nuevo Monumental, por la cuarta jornada del torneo de Primera División.
El arranque del cotejo fue frenético y prometedor para ambos conjuntos debido a la intensidad y verticalidad que plasmaron en los últimos metros con sus delanteros y volantes a la hora de crear juego.
Una jugada de Giovanni Lo Celso, lo más peligroso de la visita en la primera etapa, y un remate mordido de Teófilo Gutiérrez, fueron las chances concretas que pudieron cambiar la historia de no ser por las grandes reacciones del portero local Lucas Hoyos.
Por su parte, La Crema apostó al contragolpe y contó con varias ocasiones para quebrar el cero, incluido un tiro libre de Fernando Luna, que con su remate complicó al arquero Sebastián Sosa. Sin embargo, el ex golero de Vélez logró desviar el balón.
Con el correr de los minutos fue decayendo el nivel del juego y entró en un sinfín de roces y discusiones constantes, una de las cuales terminó con Walter Serrano en el piso -en medio de los forcejeos- y el árbitro Gonzaléz mostrando la tarjeta amarilla para tranquilizar los ánimos, que continuaron exaltados hasta el final de la primera etapa.
El Canalla, cerca del cuarto de hora del complemento, tuvo una situación clarísima que no logró aprovechar: Marco Ruben inventó una pared con Lo Celso y en la devolución con pase exquisito el goleador remató cruzado y el balón pasó pegado al poste izquierdo de Hoyos.
El juego continuó con la disputa de la pelota en el mediocampo, hasta que sobre la media hora el local logró hacerse dueño del pleito y acorraló a Central contra las cuerdas por medio de remates de media distancia.
El final del encuentro tuvo a Rafaela lanzado al ataque, buscando el triunfo, que nunca llegó. Sobre el final, Borgino se perdió la victoria cuando definió desviado con el arco a su disposición, ya que Sosa estaba rendido en el suelo.