"Estoy orgulloso de haber estado en Boca. Pienso en terminar los partidos que nos falta de la mejor manera y después irme a mi casa y recuperar mi vida", soltó Gustavo Julio Alfaro después de que su equipo quedara afuera de la Copa Libertadores a manos del verdugo River. Una frase contundente. En esas palabras en conferencia de prensa, Lechuga lo dijo todo. La experiencia en Boca y este trompazo gigante del Millo lo dejó KO, desgastado. Y en la Ribera cayó pésimo, tanto en el oficialismo como la oposición. Por eso, ambos frentes políticos ya barajan diferentes alternativas.
Alfaro y el rol de la eterna víctima
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Como las elecciones en Boca son en diciembre, la elección del DT dependerá de quién gane, pero el oficialismo y la oposición ya tienen nombres en carpeta porque ven a Alfaro lejos.
¿Quiénes suenan o gustan para este momento de Boca? Gabriel Heinze (hoy en Vélez), Diego Armando Maradona (DT de Gimnasia), Jorge Almirón (en Al Shabab de Arabia Saudita) y Ricardo Gareca (Perú), son los apellidos que encabezan la nómina.