El presidente y el DT se reunieron esta tarde, antes de la final, ytocaron los temas más importantes de la actualidad Xeneize. ¿Román... despedida o humo?
El entrenador de Boca, Julio César Falcioni, y el presidente del
club, Daniel Angelici, mantuvieron una reunión en el hotel en el cual
esta instalada la delegación a la espera del encuentro ante el
Corinthians, y hablaron de una amplia gama de temas, desde la situación
de Juan Román Riquelme a las futuras incorporaciones.
El primer tema que se tocó fue la continuidad del entrenador, y Falcioni
le dijo que quería seguir “al menos hasta fin de año”, momento en el
cual se vence su contrato.
De ahí se pasó a la situación de Riquelme, con el cual Falcioni se
encontraría distanciado desde su llegada al club. El entrenador le
habría definido a Angelici la relación que mantiene con el futbolista
como “normal” entre profesionales.
En la reunión, Angelici tampoco habría andado con vueltas a la hora de
referirse a otro de los históricos del plantel, por eso le habría
preguntado a Falcioni si “quería limpiar” a Rolando Schiavi.
El técnico también fue claro y le aseguró al presidente que eso no era
cierto, pero que “no le aseguraba” la titularidad al defensor.
Lo último que se trató en la charla llevada a cabo en una de las
habitaciones del hotel Hilton de San Pablo fue el tema de los refuerzos
para la próxima temporada.
La lista es bastante corta: Falcioni quiere un zaguero y un volante central, y un punta que vaya por afuera. Si bien no trascendieron nombres, Falcioni pretendería que el marcador central sea Lisandro López.
¿Y después qué, Román?
Un rumor lanzado desde el entorno de Riquelme sobre la
inminente ida del jugador de Boca tras el partido con Corinthians corrió
como reguero de pólvora.
La versión, que no tuvo correlato de una voz oficial confirmando o
desmintiéndola, llegó hasta diarios del exterior, tal cual publicó el
diario on line El Comercio, de Perú.
Ofrecimientos de Emiratos Arabas Unidos y Qatar fueron acercados al
futbolista, aunque Riquelme tiene dos años de contrato aún, acordados
con la anterior gestión de Jorge Amor Ameal, lo cual derivó en la
disconformidad del entonces tesorero Angelini, hoy presidente.
Riquelme, por lo pronto, y mientras corrió la versión, estuvo encerrado en el hotel junto a sus compañeros de Boca.
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