El técnico de la Selección de Inglaterra, Sam Allardyce, se encuentra envuelto en un escándalo tras haber sido descubierto por una cámara oculta y una exhaustiva investigación periodística que lo muestra en una charla con empresarios a los que se ofrecía como intermediario y les explicaba cómo eludir leyes y "adueñarse" de jugadores.
La grabación, realizada por periodistas de diario The Telegraph de ese país, mostró el diálogo de Allardyce con los emisarios chinos, en el que les contaba los artilugios necesarios a cambio de unas 400.000 libras esterlinas.
El entrenador, que durante la mañana del martes se fue de su casa sin dialogar con la prensa, también les aconseja cómo hacer para apoderarse de los futbolistas, algo que se encuentra prohibido por la asociación del fútbol de Inglaterra.
"Conozco a algunos agentes que lo hacen todo el tiempo. Obviamente el dinero fuerte está ahí, no es un problema esquivar a sus ridículas reglas", les comenta.
Sus palabras destaparon una trama de corrupción que podría acarrear a otras figuras de la Premier League.
En otra de las reuniones, y luego de avisar que la estrategia sería viajar a Asia, criticó: "No podés pagar un jugador, un representante, un CEO. Eso se hacía hace 20 o 30 años".