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Al-Khelaifi es el dueño del Paris Saint Germain, que adquirió a Neymar por 222 millones de euros y ahora gastaría otros 180 para fichar a Mbappé. Su pasado como tenista.
Al-Khelaifi no eligió al fútbol como su deporte. Lo suyo era el tenis. Llegó a ser 995 del ranking ATP y representó a Qatar, su país, en 43 series de Copa Davis: ganó solamente doce encuentros en singles. Nacido en Doha, con fuertes vínculos con la familia real, es uno de los 100 hombres más ricos del mundo. Y es el responsable de que el PSG haya invertido 222 millones de euros por Neymar, y que esté a punto de desembolsar otros 180 para incorporar a Kylian Mbappé.
Es un empresario de medios —es dueño de beIN Media Group, una compañía de medios y entretenimientos de su país— y administra el fondo Qatar Investment Authority. De ahí salió el dinero para comprar el 70% del PSG. Fue en 2011, y pagaron alrededor de 60 millones de dólares. En 2013, adquirieron la parte restante y quedaron como dueños totales del club parisino. Él se posicionó como presidente. Lo maneja todo.
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"Siempre estamos en busca de un nuevo Messi. La inversión va a volcarse en jóvenes talentos, aunque a según qué edades no pueda saberse si se convertirán en jugadores de ese nivel", avisó en 2011, cuando incorporó a Javier Pastore por 45 millones de euros. Ahora fue más allá. Con la idea de ganar la Champions League —su objetivo real—, buscó a uno de sus socios en el Barcelona y se quedó con Neymar. Quiere que el brasileño sea el artífice de un logro histórico, de una campaña inolvidable.
"Hago mucho, pero no voy a decir a los medios de comunicación. Hay cosas que deben permanecer en el interior del club. Hablamos mucho, pensamos que funciona. En esos momentos, es de 24 horas 24", contó sobre su trabajo. No suele aparecer en los medios de comunicación. Lo hace solamente en situaciones críticas, cuando el equipo no está a la altura de sus expectativas. La última entrevista fue en marzo del 2011, después de la caída estrepitosa de su club frente al Barcelona: "No hemos estado a la altura de lo que iba a ser uno de los aspectos más destacados de nuestro proyecto", dijo, sin filtro. En aquel entonces aseguró que no habría grandes cambios.
Eso parece haber quedado atrás. De la noche a la mañana, rompió el récord del monto de una transferencia. Y está dispuesto a más: quiere sumar a Kylian Mbappé, la figura emergente del Monaco, por quien pondrían 180 millones de euros. Así, en un mercado de pases destinarían 400 millones de euros en el armado del plantel.
Al-Khelefi lo tiene todo. Pero le falta algo: la Champions League. Quiere construir un equipo capaz de conseguirla.
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