Desde el mismo momento que Patricio Loustau hizo sonar el silbatazo final del partido ante Rosario Central, se activó esa "bomba" que siempre suele estar escondida en el Mundo Boca. Y a pesar que estaba claro que eso podía suceder, por la inestabilidad de la situación, por el carácter definitorio del encuentro (casi una final) y por el funcionamiento de un equipo con más sombras que luces, la cuestión es que el "día después" provocó un cimbronazo tremendo, donde se pasó a hablar de la continuidad del técnico, la posibilidad de un retiro de Tevez y una "limpieza" en un plantel que se acostumbró peligrosamente a perder cotejos decisivos.
1) La situación del Mellizo: Tiene contrato hasta junio y todo indica que lo cumplirá, más allá de los cuestionamientos de una parte de la dirigencia y de las críticas de los hinchas. La salida de otro ídolo no parece ser la mejor la solución para un presidente del club que ya fue castigado duramente por las partidas de Bianchi y Riquelme. El tema a descifrar es como el DT saldrá parado de una seguidilla de partidos decisivos, ante San Lorenzo, Racing y River.
2) El malestar de Tevez: Tras la eliminación de la Libertadores, El Apache amagó con irse pero lo convencieron de seguir con la ilusión de jugar la próxima. Esto no será así porque Boca quedó afuera de la Copa Argentina. La gran ilusión de Carlitos se hizo añicos y con ella también sus ganas de jugar. Ayer no compartió el almuerzo con todo el plantel, está en duda su presencia para el partido del domingo, supuestamente por un golpe y al parecer otra vez evalúa, puertas adentro, la chance del retiro. Si lo hace, logrará calma interior, pero quedará muy mal parado ante los hinchas y dejará expuesto, en soledad, a Barros Schelotto. Es cierto que Tevez dejó mucho para volver a Boca en su mejor momento, pero eso no quita que tiene un contrato por cumplir y no hacerlo provocaría un malestar mayor. Por eso, aunque muchos ya dan por segura la salida de Carlitos a fin de año, seguramente será una situación a evaluar cuidadosamente por el delantero.
3) La limpieza del plantel: Como suele pasar en estos casos, seguramente rodarán cabezas de los más señalados y de otros que no son tenidos en cuenta. Ya se habla de la partida de Guillermo Saraw, Rodrigo Bentancur, Juan Manuel Insaurralde, Federico Carrizo, Andrés Cubas y Lisandro Magallán, entre otros. Y, al mismo tiempo se habla de traer un arquero y un zaguero de categoría.
4) El futuro inmediato: Más allá de la frustración, hay un torneo por jugar, con un compromiso a ganar, el próximo domingo, frente a Gimnasia, en La Plata. El equipo necesita dar una prueba de carácter, cortando una racha prolongada sin triunfos de visitante. Se necesita de la reacción de los jugadores, pero también de la mano del técnico, con un planteo más arriesgado y sacando a jugadores que están en bajo nivel.