Jorge Sampaoli, el ex entrenador de la Selección Argentina que está actualmente en Flamengo, quedó envuelto en un escándalo: Pedro Guilherme, jugador de su equipo, denunció a Pablo Fernández, su preparador físico, por unos supuestos golpes en el vestuario. Hay incertidumbre sobre el futuro del cuerpo técnico.
Los incidentes se habrían originado luego de la victoria de este sábado como visitante frente a Atlético Mineiro por 2-1, en un partido correspondiente a la 17ª fecha del Brasileirao. Según medios de aquel país, el delantero le habría reclamado al director técnico por no haber sumado minutos durante el encuentro.
El que salió a defender a Sampaoli fue Pablo Fernández, preparador físico que integra el cuerpo técnico del entrenador argentino. En ese momento se habría desatado una fuerte discusión entre ambos: como consecuencia, el futbolista tendría un corte en el labio y lesiones en algunos de sus dientes.
El regreso de la delegación a Río de Janeiro se demoró, ya que Pedro Guilherme fue a hacer la denuncia a una comisaría de Belo Horizonte y allí fue sometido a un examen forense para constatar sus heridas. Lo acompañaron varios de sus compañeros, quienes además declararon como testigos.
El futuro de Sampaoli en Flamengo está en duda. La dirigencia del conjunto carioca evalúa qué medidas tomar ante este hecho y varios medios brasileños coinciden en que el entrenador daría un paso al costado si deciden correr a su colaborador. Además, sostienen que la relación entre el DT y el plantel está quebrada.
"Podría estar aquí hablando de los pocos minutos que recibí en los últimos partidos, pero lo que pasó hoy fue más grave que lo que puede pasar dentro de las cuatro líneas. Cobardemente, sin motivo e inexplicablemente, fui atacado, golpeado en la cara, por Pablo Fernández, miembro del cuerpo técnico de Sampaoli.
La cobardía física se antepuso a la cobardía psicológica que he sufrido en las últimas semanas. Alguien que se cree con derecho a agredir a otro no merece el respeto de nadie. He pasado por muchas pruebas aquí en Flamengo, pero nada se compara con la cobardía sufrida hoy".