El béisbol es uno de los deportes más tradicionales de Estados Unidos. Los norteamericanos lo consumen en demasía, apasionadamente. Los New York Yankees son, justamente, el equipo más tradicional de dicho deporte. Pero ahora, ante el desembarco del New York FC a la MLS, tienen inquilinos en su cancha: la franquicia de David Villa hace de local allí.
Lo gracioso es cómo readaptan la cancha. Si bien es normal ver canchas anfibias donde se juega fútbol americano y tradicional, acá es diferente. Las dimensiones de un campo de béisbol son diferentes: es una especie de rombo con lados diferentes, que se cierra en la zona de bateo. Además hay zonas de tierra por donde los bateadores corren para ganar las bases. Todo eso queda afuera cuando se ponen dos arcos: a lo ancho se arma la cancha de fútbol, con el círculo central y toda la parafernalia.
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