Fue Gallardo quien les dijo a los directivos que no podían seguir viajando al exterior en jogging. Fue Gallardo, también, quien en la primera reunión entre los representantes de la marca y los dirigentes, opinó que saliera del típico traje negro, camisa blanca y corbata negra. Fue Gallardo quien finalmente decidió entre los distintos modelos que ofrecieron los diseñadores.
"Le teníamos un poco de miedo porque él es muy entendido del tema, entonces no sabíamos qué iba a querer. Pero por suerte quedó muy contento y conforme con los trajes: le gustaron mucho", le dice Emilio Abal, director de Giorgio Redaelli, a DIARIO POPULAR. "Incluso nos pidió un gabán, un sobretodo bien tano, porque no se quería morir de frío, así que se lo hicimos", agrega.
La influencia de Gallardo en la imagen del plantel fue tan grande que incluso pidió separar los modelos de los trajes según los miembros del cuerpo técnico: los auxiliares vestirán un traje gris clarito, los dirigentes usarán un gris oscuro, y los futbolistas y cuerpo técnico lucirán un modelo en negro; todos con detalles en rojo, forrados en blanco y rojo, y con el escudo y la banda bordados en la etiqueta de adentro. Los zapatos son negros, las medias rojas, y los cinturones negros tienen detalles en rojo.
El primer encuentro con el plantel ocurrió una mañana después del entrenamiento. Fueron seis personas de la marca a tomarle medidas a futbolistas, cuerpo técnico y dirigentes. Abal asegura que se encontraron con "un grupo muy coqueto, que sabe usar ropa fina: fue muy fácil trabajar con ellos". Escucharon algunas demandas particulares: Milton Casco quería los pantalones bien achupinados; Matías Kranevitter pidió una camisa entallada al cuerpo; todo bajo la atenta mirada de Leonardo Ponzio, otra fuente de consulta estética de los directivos.
Ayer en la concentración, donde hicieron en la entrega formal de la ropa —cada jugador recibió un saco, dos camisas, una blanca y una negra, un pantalón y un par de zapatos— hubo que hacer correcciones: Jonathan Maidana pidió ajustar la camisa, Lucho González acortar las mangas de los brazos. "Pero todos estaban muy contentos. Barovero me dijo que llevaba días buscando un pantalón para una fiesta y quería pasar por el local a comprarse otro, y Chiarini, después de probarse la ropa, se la dejó un rato: hasta lo usó para comer", cuenta Abal.
Rodrigo Mora y Sebastián Driussi fueron los más fáciles para las fotos. Apenas terminaron los nudos de sus corbatas, les sonrieron a las cámaras con la naturalidad de un modelo. Javier Saviola y Carlos Sánchez se acercaron a agradecerle a Abal y les comentaron que les gustaba "mucho lo que hicieron".
River usará los trajes en todos los traslados de acá a dos años. En los vuelos a Japón, mientras tanto, cada vez que suban y bajen de los aviones, vestirán la ropa de Giorgio Redaelli. Pero arriba, en las cabinas, podrán ponerse lo que les resulte más cómodo. Gallardo, por su parte, el sabio de la pilcha, los eligió: durante dos años será modelo de la marca.
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