Italia festejó en los penales y es el nuevo rey de Europa

Luke Shaw, a los 2 minutos de juego, anotó el gol tempranero con el que los ingreses comenzaron ganando, pero en el complemento, a los 66, Leonardo Bonucci marcó el empate para la Azurra. Tras persistir la igualdad en el tiempo extra, el arquero italiano Gianluigi Donnarumma se vistió de héroe en los disparos desde los doce pasos conteniendo dos disparos y los visitantes se llevaron la victoria.

De esta manera, el equipo de Roberto Mancini se coronó campeón de la décimo cuarta edición de la Eurocopa de Naciones, celebrada en once ciudades del continente por cumplirse 60 años de su creación. Este fue el segundo título de Europa que levanta Italia, luego de su primera consagración en 1968.

Inglaterra abrió los caminos en los albores del encuentro y eso le sirvió para acoplarse de la mejor manera a la disposición del rival. Tan solo había corrido un minuto en el reloj del gran tablero en Wembley y el local ya había dado el golpe. La jugada nació desde campo propio, allí donde Harri Kane trasladó y luego abrió hacia la derecha para Trippier, quien controló, levantó la cabeza y elevó un centro al segundo palo que Shaw mandó a guardar con un remate furibundo.

A la Azzurra le costó ser el equipo que demolió rivales en el trayecto de la competencia, pero igual tuvo oportunidades claras para poder empatar. Una de ellas llegó a la media hora de juego por intermedio de Chiesa, que trasladó por tres cuartos de cancha con dirección al objetivo y sacó un derechazo desde afuera del área que le sacó chispas al palo izquierdo del arquero Jordan Pickford.

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Sobre el final del primer tiempo, el equipo de Roberto Mancini volvió a protagonizar una chance que lo llevaba a la igualdad, pero la mediavuelta de Marco Verratti dentro del área a los 45 minutos fue controlada sin atenuantes por Gianluigi Donnarumma. Así, los ingleses se fueron al descanso aferrados al 1-0.

Ya en el complemento, el dueño de casa empezó mejor y a los 63 pudo haber ampliado la ventaja con un cabezazo de John Stones que el arquero Donnarumma sacó con un guante a puro reflejo. Sin embargo, pese al buen arranque inglés, Italia buscó el empate y lo encontró cinco minutos después.

Iban 68 cuando Leonardo Bonucci, el marcador central, fue hasta el área en una pelota parada y empujó debajo del arco un rebote que decretó la igualdad y forzó el tiempo extra de un partido que se le había presentado cuesta arriba.

En el adicional, ambos estuvieron cerca de quebrar la paridad. Primero amenazó Inglaterra con un gran desborde de Sterling que Chiellini llegó a cortar justo, emulando a Mascherano, cuando el win vestido de blanco daba el pase al medio dentro de la zona de peligro. Luego, Pickford sacó una chance clara para Italia y se vistió de héroe para sostener el resultado.

En los penales, el arquero italiano Donnarumma se vistió de héroe y le tapó los penales a Sancho y a Saka luego de que Rashford impacte su disparo en el palo, lo que llevó a Italia a ganar la serie por 3-2 y consagrarse campeón de Europa en un torneo que mereció desde el comienzo.