Fútbol
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El ídolo desechó la posibilidad de dirigir a Vélez, cuyo momento futbolístico está al límite. Dice que está en el mejor momento con su esposa pero que "intento dirigir mi casa y no puedo".
Hubo un tiempo en que Carlos Bianchi anunció que volvería a Vélez en caso de "peligro deportivo, como un descenso". Bianchi ponía su figura como la de un bombero o un matafuego: alguien a quien recurrir solamente en caso de emergencia. Anoche, en la presentación de un libro que rememora su historia con Boca, descartó la chance: "Tengo 67 años, estoy disfrutando de mi familia, mis nietos y los viajes, ¡hay que aprovechar que todavía podemos agarrar la valija!", enfatizó.
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"Estamos en un muy buen momento con mi mujer (Margarita). Estoy tratando de dirigir desde mi casa y no puedo. ¡Es una cosa increíble!", ironizó el ex entrenador, cuya última experiencia fue en Boca, entre 2013 y 2014, sin éxitos. "Estoy tratando de disfrutar lo que no pude disfrutar en su momento", agregó.
"Estamos en un muy buen momento con mi mujer (Margarita). Estoy tratando de dirigir desde mi casa y no puedo. ¡Es una cosa increíble!", ironizó el ex entrenador, cuya última experiencia fue en Boca, entre 2013 y 2014, sin éxitos. "Estoy tratando de disfrutar lo que no pude disfrutar en su momento", agregó.
Además, contó una vivencia que protagonizó en estos días: "Usted qué va a hacer a los 67 (años) repregunté", dijo el DT, que desde el otro lado de la línea telefónica escuchó la contestación que pretendía escuchar: "No, yo estaré jubilado". Entonces, Bianchi le tiró a su interlocutor la frase que remarca que permanecerá fuera del mundo del fútbol: "¿Y usted pretende que yo trabaje?".