Fútbol
El "Granate" no abrirá las puertas de ninguna de sus sedes: suspendió todas las actividades. Además, pedirían postergar el partido del domingo e intentarán viajar a Santa Fe a despedir al futbolista. El "Tatengue" se sumó a la medida.
La muerte de Diego Barisone paralizó al fútbol argentino, pero especialmente a Lanús. El club, que perdió al marcador central en el accidente de tránsito que sufrió esta madrugada en Santa Fe, cerró las puertas de sus tres sedes y suspendió todas las actividades, de todas las disciplinas.
Ante el trágico hecho, los dirigentes del club del sur bonaerense le pedirán a las autoridades de la AFA que posterguen el partido que se disputará el domingo, contra San Martín de San Juan, en la provincia cuyana.
Además, los directivos están en búsqueda de un avión para que todo el plantel viaje a Santa Fe para despedir los restos del futbolista.
Unión, el equipo de donde surgió el defensor, también se sumó a la medida que tomó la institución "Granate" y, por hoy, cerró sus sedes.
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