El Manchester United aplastó en el King Power Stadium al Leicester por 3 a 0 y se arrimó a los puestos de Champions League de la Premier, beneficiado por los recientes tropiezos del Arsenal y el Liverpool, dos de sus rivales en ese “mini torneo”.
El equipo de José Mourinho, que llevaba tres empates seguidos, escaló a la sexta posición de la Liga inglesa, pero a un punto del quinto puesto que tiene el Liverpool y a dos del cuarto que ostenta el Arsenal.
Los Diablos Rojos son un equipo en ascenso. Todo lo contrario que el Leicester, en caída libre. El vigente campeón encajó ante los ’reds’ su cuarta derrota seguida y está a solo un punto del descenso que marca el Hull, antepenúltimo
El conjunto de Claudio Ranieri mantuvo el tipo durante casi toda la primera parte. Sin embargo, el United rompió el partido en dos minutos justo antes del descanso y eso dio un giro al partido.
Fue el armenio Henrikh Mkhitaryan el que, desde el mediocampo, protagonizó una gran acción individual para superar a Kasper Schemeichel en el minuto 42. Dos después, un avance desde la derecha y un centro al área del ecuatoriano Antonio Valencia fue coronada por el sueco Zlatan Ibrahimovic, que puso el 0-2 en el marcador.
El Leicester decayó y el Manchester United empezó a jugar a su antojo. Al inicio de la segunda parte sentenció el choque con una combinación entre Henrikh Mkhitaryan y Juan Mata que culminó el español para anotar el tercero.
La victoria del conjunto de Mourinho pudo ser más abultada ante un adversario desencajado. La falta de acierto visitante evitó un descosido más grande para el campeón, en plena decadencia.