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El defensor se presentó en el predio en la mañana de este martes pero fue mandado a su domicilio debido a que se encuentra con un cuadro febril.
A menos de dos semanas del Superclásico, Boca tuvo una baja importante en el entrenamiento de la mañana de este lunes en el predio de Ezeiza: Marcos Rojo. El referente del equipo de Fernando Gago, que viene de ser titular y marcar un gol en el triunfo por 3 a 1 a Belgrano en Córdoba, se presentó para ser parte de la práctica pero fue mandado a su domicilio debido a que se encuentra con un cuadro febril.
Más allá de su ausencia en el entrenamiento, no habría riesgo de que Rojo no sea parte del próximo partido de Boca: este sábado, desde las 20.30, contra Estudiantes en La Bombonera. Si bien hay que ver como evoluciona la fiebre del jugador, se espera que esté recuperado y Gago confía en poder contar con él para enfrentar al Pincha en una nueva fecha de Torneo Apertura.
Rojo viene de ser fue fundamental en la victoria de Boca ante Belgrano. Primero, el defensor abrió el marcador a los 37 minutos después de encontrarse con un balón dentro del área luego de un córner y, más tarde, volvió a ser clave en el mismo arco, pero esta vez para evitar lo que era el empate del Pirata en Córdoba: sacó con la cabeza un tiro en la línea que ya había sobrepasado al arquero Agustín Marchesín.
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Posterior al partido, el central charló con la transmisión oficial del partido, donde analizó el desarrollo del juego y valoró la victoria: “Contento, estoy trabajando para estar bien, para estar a disposición siempre. Pasando un buen momento, disfrutando otra vez del fútbol". "Somos justos ganadores, partido difícil y en una cancha difícil. Nos propusimos combatir, hay que pelear. Estamos pasando por un gran momento, estamos muy bien. Hay que seguir trabajando porque se viene lo más lindo”, cerró.
Rojo llegó en 2021 a Boca, un año después de su vuelta al fútbol argentino para vestir la camiseta de Estudiantes. Este paso por el club de La Plata fue para el olvido: jugó un partido, se lesionó, vino la pandemia y no volvió a vestir la camiseta del club donde inició su carrera. Mientras que en el Xeneize se volvió un referente: hoy lleva 114 partidos, 9 goles y cuatro títulos.
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