Ezequiel Esperón, el joven futbolista de 23 años que falleció al caer de un sexto piso mientras se encontraba con amigos en un departamento del barrio Villa Devoto, se había formado como futbolista en las inferiores de Vélez, Huracán (un breve paso) y All Boys, y luego anduvo por el exterior, pero nunca llegó a debutar en la primera división de la Argentina.
Sus inicios fueron en Vélez, a los 10 años. El volante estuvo 4 temporadas consecutivas en las juveniles del Fortín, hasta que quedó libre. Ahí, pasó a Huracán, pero su paso en el quemero fue breve y terminó vistiendo los colores de All Boys, club que completó su formación juvenil y en el que permaneció hasta los 17 años.
Conmoción: murió un futbolista argentino al caer desde un sexto piso
En el Albo estaba bien, pero no tuvo su baustismo en primera división porque cuando estaba en la Quinta le surgió la chance de ir a jugar al Internacional de Porto Alegre de Brasil y decidió emigrar. Una vez que se cerró la operación, firmó contrato, estuvo una temporada y quedó libre.
Con el pase en su poder, cerró con Gremio, donde jugó entre 2016 y 2017, y cumplió el sueño de debutar en primera. Como no encontró la continuidad que imaginó, se fue a probar suerte a Atlante del fútbol de México. Allí estuvo un año y medio, disputó un total de 35 partidos y hasta se cruzó con el Dorados de Sinaloa de Diego Armando Maradona.
Después de ese año y medio, en junio pasado, Esperón había quedado libre del Atlante y se encontraba en la Argentina a la espera de una oportunidad.
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