Real Madrid derrotó 2-0 a Chelsea en el estadio Santiago Bernabeu, por la ida de los cuartos de final de la UEFA Champions League y encaminó la serie de cara a la vuelta en Londres. Además, Milan se impuso por la mínima sobre Nápoli.
Partidazo desde que el árbitro marcó el comienzo. En un duelo bastante táctico, Real Madrid se instaló desde el primer segundo en campo rival, manejando la pelota con tranquilidad y paciencia, pero jugando a uno o dos toques para intentar encontrar el hueco en una defensa bien armada.
Del otro lado, un Chelsea con una idea muy clara: agruparse, no dar ventajas, recuperar y salir rápido a las espaldas de la línea defensiva madridista, que dejaba casi media cancha libre. En el inicio le rindió, porque tuvo dos contraataques en los que solo falló la definición.
Pero al Madrid no lo podés perdonar, y menos en el Bernabeu. El Merengue encontró la ventaja a los 21' en los pies de Karim Benzema, que definió solo tras una jugada sucia en la que Vinicius disputó la pelota dentro del área inglesa con dos defensores. Chelsea siguió aguantando con su plan, pero daba la sensación que, en la que los de Lampard fallen, el local metía el segundo.
En el segundo tiempo, el panorama se le puso aún más difícil a los Blues, que se quedaron con uno menos por la expulsión de Ben Chilwell a los 13'. Y a los 30', el ingresado Marco Asensio remató de primera un buen pase atrás de Vinicius y estiró la ventaja.
El resultado le quedó corto al Real Madrid, que tuvo chances como para meter otro gol y liquidar casi definitivamente la serie. De todos modos, encarará la revancha la semana que viene en Londres con comodidad.
El Rossonero venció por la mínima al Nápoli en el Giuseppe Meazza: fue 1-0 con gol de Ismael Bennacer a los 40 minutos del primer tiempo. Los Gli Azurri, que no contaron con su goleador Victor Osimhen, terminaron con un futbolista por la expulsión de Zambo Anguissa a los 28' del complemento. La revancha será la semana que viene en el Diego Armando Maradona.