Richarlison lloró cuando fue reemplazado en el debut de la Selección de Brasil en las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2026 con goleada de local a Bolivia. Esa imagen del delantero llorando desconsoladamente en el banco de suplentes recorrió el mundo futbolístico y ahora él mismo se ocupó de aclarar los motivos.
“En el campo soy un jugador feliz, en equipo trato de ayudar lo máximo posible. A veces las cosas no salen como queremos. Creo que esta parte fuera del fútbol acabó interponiéndose en mi camino. Aunque quieras hacer las cosas bien, acaba saliendo mal. Seguiré centrándome en el club, la tormenta pasó”, aseguró el futbolista quien hace poco rompió su vínculo con el empresario Renato Velasco, quien lo acompañaba desde el inicio de su carrera.
Entonces continuó: “Pasé por un momento turbulento en los últimos cinco meses. Ahora las cosas están bien en casa. La gente que sólo tenía un ojo puesto en mi dinero se alejó de mí. Ahora las cosas empezarán a fluir, estoy seguro de que haré una buena temporada en el Tottenham y que las cosas volverán a su cauce”.
Aclaró también el motivo de sus lágrimas, que no fueron por su rendimiento. “Ese momento triste no fue porque jugué mal, en mi opinión no hice un mal partido en Belém, fue más bien un arrebato por las cosas que me estaban pasando fuera del campo, que se salieron de control. No por mi parte, sino por personas cercanas a mí”, explicó.
Y finalizó: “Voy a volver a Inglaterra, buscaré ayuda psicológica, de un psicólogo, para trabajar en mi mente. Eso es todo, volveré más fuerte. Creo que estaré en la próxima (convocatoria), trabajaré para eso. Se trata de tener una buena racha en el Tottenham. Esta semana me voy a sentar a hablar con ellos, necesito agarrar ritmo de partido y llegar bien hasta aquí”.