Tras la derrota por 2 a 0 ante el Globo, el entrenador decidió dar un paso al costado: su equipo no ganó ni convirtió un solo gol en el torneo. El Fortín define en 10 días la Supercopa Argentina.
"Que se vayan todos, que no quede, ni uno solo", cantaron muchos hinchas de Vélez tanto dentro como afuera del estadio tras la derrota 2 a 0 ante Huracán en el Amalfitani. Y poco después se supo del final del ciclo de Sebastián Domínguez como DT del Fortín. El ex panelista de ESPN no resistió el duro golpe ante el Globo.
La campaña del equipo es muy mala: dos puntos en ocho partidos, sin goles en 770 minutos del Torneo Apertura. Insólito para un equipo que fue campeón en la Liga Profesional 2024 y ahora está en zona de descenso (Aldosivi bajaría por promedio por lo que el cupo de la anual lo ocupa el club de Liniers).
El final del ciclo de Seba, que como jugador fue campeón con Vélez, se había instalado tras la anterior derrota de local, frente a Godoy Cruz, pero la dirigencia lo sostuvo porque consideró que el rendimiento del equipo debía valorarse a pesar del resultado, y el DT tenía la certeza de que podía seguir.
El clima de este domingo en Liniers se exponía como muy pesado. "Echá a Dominguez", gritaban los hinchas fuera del estadio, un mensaje directo al presidente del club, Fabián Berlanga. Media hora después de terminado el partido, se anunció que Domínguez no iba a acudir a la habitual conferencia de prensa post partido y luego salió a la luz el motivo.
La llegada de Sebastián Domínguez generó mucha ilusión en los hinchas de Vélez por el sentido de pertenencia que tiene él con el club de Liniers y aparte que forjó una gran historia como jugador. Sin embargo, no pudo continuar el buen trabajo de Gustavo Quinteros, ni hacer un equipo competitivo.
Con el amor que le tiene al club, Domínguez entendió que no podría revertir esta situación y se fue a 10 días de que el club dispute una final: por ser campeón del fútbol argentino el 12/3 definirá la Supercopa Argentina con Central Córdoba, ganador de la Copa Argentina.